Reverencia musical a la cubanía

Foto Roberto Mesa

Quizá todo comenzó a gestarse cuando el hermano que le dio el arte y que comparten con idénticas manos prodigiosas, estuvo en Manzanillo para abrazarlo en el día de su cumpleaños.

Quizás haya sido antes; sólo ellos lo saben. La realidad es que faltan horas para que los maestros Frank Fernández y Wilfredo Pachy Naranjo, ambos Premios Nacionales de Música se unan desde el arte en una noche que trascenderá espléndida porque, en el Día de la Cultura Cubana, enaltecerá lo más genuino del pentagrama de la Isla.

El primero es además el director general de la Gala que acontecerá desde la nueve de la noche en el Teatro Bayamo. El segundo llegará al escenario con su Original de Manzanillo, orquesta emblema de las charangas en Cuba.

«Agradezco a mi hermano Frank la invitación para este hermoso momento de homenaje a lo auténticamente nuestro», me comentó hace una horas Pachy Naranjo, a quien he visto emocionarse mucho por estos días de exigencias y tensos ensayos.

La preparación la comparten junto a la orquesta de Adalberto Álvarez, conocido como el «Caballero del Son», también Premio Nacional de Música, y el joven Javier Millet, director de los bisoños músicos que componen la Orquesta Sinfónica de Granma.

Los 40 años del tema «A Bayamo en coche», de la firma de Adalberto con el legendario Son 14, y un tributo a Beny Moré, el Bárbaro del Ritmo, definirán la esencia del espectáculo, cuyo escenario, quizá, deje escapar el aliento de la Reina Alicia, la Alonso bella, elegante y única que hace unas horas se instaló para siempre en la danza del corazón de la Mayor de las Antillas.

«Estruja el pecho. A ella también es el regalo como símbolo de la danza cubana y universal. Tengo el orgullo de sentirme su amigo; Alicia siempre era muy deferente y cariñosa, pero sobre todo era una furibunda defensora de la calidad», manifestó Frank Fernández en entrevista para la Televisión Cubana.

Los acordes de pianos, que brotarán de manos prodigiosas, junto a las orquestas invitadas dibujarán hermosa, desde el arte, la noche del domingo en la Cuna de la Nacionalidad Cubana que hoy se viste de fiesta.