En dos años de pandemia y con más de un millón de diagnosticados con la COVID-19 desde que en marzo de 2020 se confirmaran en Cuba los primeros pacientes positivos, en la Isla se ha salvado el 97,4 % de las personas que han enfermado.
Esto «no es un número más en el cúmulo de estadísticas: es, por encima de todo, muestra indiscutible de cuánto esfuerzo ha hecho Cuba para proteger la vida de nuestro pueblo en este periodo de duro batallar contra la epidemia país adentro», ha comentado el Ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, en la web del Minsap.
Sobradas lecciones han traído consigo estos complejos meses de enfrentamiento al virus, que demuestran la imperiosa necesidad de cumplir en todos los escenarios con los protocolos de actuación diseñados para el manejo preventivo y terapéutico de la enfermedad, añadió el titular del sector.
Al reflexionar sobre el incremento de los contagios y los estudios de secuenciación del virus que reflejan la prevelancia creciente de la variante ómicron en Cuba, Portal Miranda señaló: «estamos conscientes de que en esta etapa muchas personas con síntomas leves no acuden a las instituciones de salud o no son estudiadas, lo cual indica que las cifras actuales son más elevadas».
«Ese incremento de casos diarios también está sucediendo en el mundo y nada puede hacernos pensar que en nuestro país será diferente», añadió.
En los primeros 15 días de enero se confirmaron en Cuba 32 720 nuevos contagios, cifra muy superior a la reportada en noviembre (9 994) y diciembre (3 845). La última semana, dijo, es la cuarta en que de manera consecutiva persiste el aumento de casos. Ello representa 11 605 enfermos más que en los anteriores siete días.
Las provincias con mayor incidencia fueron Camagüey, Mayabeque, Villa Clara, Holguín, Artemisa y Las Tunas, territorios que concentraron el 49,6 % de los casos de la semana.
Ni siquiera los niveles de vacunación que hemos alcanzado pueden hacer pensar a nadie que estamos completamente a salvo, comentó Portal Miranda, quien llamó a no dejar solo en manos de los profesionales de la Salud y de la Ciencia la protección de las familias cubanas.