Ser periodista es adentrarse en un mundo lleno de pasiones que cuando ya estás en él se torna muy difícil salirse de su rumbo.
Ser un profesional de la palabra es marchar junto al pueblo y latir en su corazón para lograr ser parte imprescindible de su vida. Es estar al tanto de lo último que acontece, tomar papel y lápiz para hacer llegar la información precisa a cada uno de los hogares. Es estar allí donde se nos necesite para mostrar el palpitar de un país que crece a pesar de todo.
Es ser preciso y verás, es no manipular, ni mentir y defender lo justo. Es la oportunidad de desmontar las fake news que nos rondan para poner a la palestra lo que realmente acontece, el verdadero sentir, lo que sí es cierto y no lo que otros desean escuchar o ver a favor de algún objetivo, que nada tiene que ver con una nación que se levanta cada día para hacer realidad su sueño de construir un mundo mejor.
Ser periodista es desprenderse en muchas ocasiones de lo que es también esencial para nuestras vidas como la familia, es a veces alejarse de ella, de los amigos, es tener incontables noches en velas, es hasta enfrentar momentos riesgosos para estar allí donde era preciso poner la palabra para el mensaje oportuno, es hasta violar los horarios de alimentación y vida para hacer lo que nos gusta, y cumplir con la razón de ser de esta profesión que es en definitiva nuestro compromiso social.
Ser un reportero cubano es un privilegio además porque hacemos un periodismo revolucionario en todo el sentido de la palabra, porque marchamos al lado del los niños, adolescentes, jóvenes y estudiantes. Acompañamos al obrero, al maestro, al científico, a la gente humilde y sencilla que siempre tiene algo que mostrar para enriquecer nuestros reportajes, crónicas, comentarios, en fin todos los géneros de este ejercicio que llena al alma de todos.
Un verdadero periodista cubano tiene además un compromiso moral que no debe defraudar jamás, es una deuda con nuestras raíces, con nuestros próceres y mártires que tanto entregaron para tener una Cuba libre y soberana. Es pulsar junto a Martí en su periódico Patria que vió la luz un día como hoy, para desde entonces convertirse en la fecha que marca nuestra celebración.
Entonces festejemos con el compromiso de continuar esta obra, de seguir junto a nuestra isla, y ahora más que enfrentamos una pandemia que azota al mundo donde nuestra labor es esencial para orientar, educar y dirigir a nuestras audiencias, que siempre buscarán nuestros mensajes porque sencillamanete somos su mejor confianza y los aliados que ellos precisan.