La Habana, 13 abr (Prensa Latina) El torneo cubano de béisbol (Serie Nacional) comenzará hoy el segundo tercio de su etapa clasificatoria sumido en un hervidero ofensivo que mantiene temblando los montículos a lo largo y ancho del archipiélago.
Un promedio de bateo colectivo de .300 con la mitad de los 16 equipos participantes por encima de esa cifra pone en evidencia el bajo nivel de los lanzadores, muchos de ellos obligados a quemar etapas en su desarrollo producto de la emigración y la contratación de otros en ligas foráneas.
Después de 25 desafíos por cada conjunto y de tres mil 301 capítulos trabajados, los serpentineros aceptan un total de dos mil 46 anotaciones limpias para un elevado de 5.58 por juego completo, números que llevan a una progresión preocupante nunca vista en los campeonatos domésticos.
A esto hay que sumarle el descontrol generalizado, que se evidencia con las mil 672 bases por bolas concedidas (4.56 cada nueve episodios), los 312 pelotazos y los 36 movimientos ilegales (balk).
Todo esto arroja un promedio de bateadores embasados por cada entrada de 1.70, lo que ha provocado que se hayan anotado dos mil 417 carreras en 195 pleitos efectuados.
La defensa no ha ayudado en esta vorágine ofensiva con 502 pifias cometidas para un average de .966, por debajo de los estándares normales.
Un total de 371 veces se han abierto las puertas del plato a causa de los errores que van a los libros, porque hay muchos que tienen que ver con el pensamiento táctico de los jugadores que no se contabilizan.
En esta fiesta de los maderos hay un bateador compilando para .539 (el pinareño William Saavedra) y otros siete lo hacen por encima de la marca de .400.
Se dice en el mundo beisbolero que la victoria en un partido depende más del 60 por ciento de la labor de un lanzador y ahí están los ejemplos de los tres mejores cuerpos de pitcheo de esta temporada.
Los Vegueros de Pinar del Río aceptan 4.14 carreras limpias cada nueve entradas, los Tigres de Ciego de Ávila 4.33 y los Industriales de La Habana 4.39, los tres al frente de la tabla de posiciones del torneo.