Manzanillo. Mayo 16.- Muchos son los esfuerzos que se realizan en nuestra pequeña isla antillana para mantener los servicios claves a la población cubana, como lo es la salud, y un ejemplo de ello lo constituye la valiosa labor que se realiza en nuestros hospitales, fundamentalmente en el pediátrico provincial Hermanos Cordové de Manzanillo, donde se brinda además todo el amor para sus pequeños pacientes.
Sin embargo a causa de ese injusto y genocida bloqueo económico, comercial y financiero que el gobierno de los Estados Unidos mantiene a nuestro pueblo por más de seis décadas, se imposibilitan la llegada de los recursos necesarios que permitan elevar la calidad de las prestaciones en estas sensibles unidades asistenciales.
Pero a pesar de todo nuestro pueblo se crece, y hoy mantenemos la gratuidad de los servicios médicos para todos los ciudadanos sin importar creencias políticas, ni religiosas, etnias, ni nada, enfrentando cualquier obstáculo que nos impongan las dificultades. Bien lo sabe la licenciada Marta Cedeño Torres, vicepresidenta de la sociedad cubana de enfermería del hospital infantil manzanillero, quien conversa con nosotros del tema.
La especialista dice que «desde el triunfo de nuestra Revolución hemos tenido muchos obstáculos e impedimentos para mantener nuestro sistema de salud gratuito, a pesar de la situación económica propia del subdesarrollo arreciadas por el bloqueo.
Para Cuba esto representa muchos sacrificios que se vencen mediante el aporte para la formación de nuevas generaciones e impulsando a esa asistencia sanitaria, así como la necesaria investigación científica que nos ha ayudado mantener una cantidad de profesionales, médicos, las enfermeras, así como el personal técnico para cumplir una misión internacionalista en varios países del mundo.
Todo esto ha servido para ayudar a nuestro país a la compra de equipos para sostener nuestro sistema de salud gratuito, al igual que todo lo que aporta la investigación científica, los eventos nacionales e internacionales», señaló.
Si no existiese esta ley injerencista hoy no tuviéramos muchos problemas que se presentan en este sector. «Tendríamos resultados muy satisfactorios pues contáramos con más recursos, equipos de alta tecnología, mejorarían las condiciones para el traslado de los pacientes a otras provincias, podríamos obtener sin dificultades ni por terceras vías, las donaciones que nos hacen otras naciones hermanas que son tan necesarias para la atención al paciente.
Tendríamos también las materias primas para elaborar medicamentos, y los materiales que emplearíamos para trabajar con una mejor satisfacción para el personal de salud, el paciente y la familia», subrayó Cedeño Torres.
Precisamente para los cubanos la sostenibilidad de estas atenciones sin desembolsar un centavo en nuestros centros de salud tiene un gran impacto. «En realidad somos una familia privilegiada porque en ningún país existen estas políticas de atenciones gratuitas como la brinda nuestro sistema de salud, que no escatima voluntades para atender a todos sin igual. Además el paciente agradece y se va satisfecho por su recuperación», manifestó Marta.
Y cuando los dolientes regresan a sus moradas, y transmiten el agradecimiento por todo lo que se realizó por su vida sin un costo, se llenan los corazones de estos profesionales de emociones. «El personal de salud se siente complacido cuando el paciente se va de alta bien recuperado, mediante la vigilancia estricta, el cumplimiento de los protocolos.
Esto hace que se fortalezca más nuestro sistema sanitario y nos permita adquirir más experiencias. Debemos destacar la consagración, la entrega, la búsqueda de alternativas de nuestro personal que permite que los servicios continúen cada día», concluyó la licenciada.
Para tener una idea de cuánto nos impacta esta condición, el Ministerio de Salud Pública (Minsap) cubana mostró en la última sección de las Naciones Unidas (ONU) contra el bloqueo el año pasado, el informe de los daños para este sector. El Minsap publicó en su página web que sólo «en el período comprendido entre abril de 2018 a marzo de 2019, la afectación al sector de la salud asciende a 104 millones 148 mil 178 dólares estadounidenses, cifras que representa 6 millones 123 mil 498 dólares más que lo reportado el pasado año. La afectación acumulada anuestro sector es de 2 mil 913 millones 772 mil 858 dólares, desde el inicio del bloqueo hasta la actualidad».
Tanto la especialista en enfermería Marta Cedeño Torres y este redactor coincidimos con la publicación del Minsap que «más que valores y cifras, el verdadero impacto del bloqueo contra Cuba está en el sufrimiento, la angustia y la desesperación que provoca esta situación en los pacientes y sus familiares, al no poder contar con el medicamento idóneo para la atención de una enfermedad y, en muchas ocasiones, en el momento necesario para salvar una vida».
Pero a pesar de todo Cuba mantiene y mantendrá sus servicios gratuitos, porque este fue uno de los principales logros de nuestra Revolución, y una de las conquistas por la que luchamos y conservaremos contra cualquier voluntad que intente impedir nuestro avance.