Tel Aviv, 19 jul (Prensa Latina) Al menos 125 árabes fueron asesinados en Israel desde principios de año, más del doble a lo contabilizado en igual periodo de 2022, denunció hoy la ONG Iniciativas de Abraham.
Según la Organización no Gubernamental, 118 de ellos eran ciudadanos israelíes y siete extranjeros.
La prensa nacional reportó que ayer fue baleado Mehran Ouiasi, hijo del teniente alcalde de la norteña ciudad de Nazaret, Muhammad Ouiasi.
El hermano de Mehran, Rouad, fue asesinado en marzo y su primo, Abdelkader, la semana pasada.
Iniciativas de Abraham precisó que en el primer semestre la violencia criminal provocó la muerte a 111 árabes en el país, un aumento de 134 por ciento interanual.
El 89 por ciento de los asesinatos fueron cometidos con armas de fuego y el 58 por ciento de las víctimas tenían 30 años o menos.
La institución citó entre las causas que contribuyen a este fenómeno al desempleo y la pobreza, pues la mitad de todas las familias árabes sufren ese último flagelo.
Cada una de estas víctimas fue el resultado del crimen rampante y la violencia que prolifera en ausencia del Estado, denunció en su último informe sobre el tema.
Asimismo, criticó el trabajo del ministro de Seguridad Nacional, el ultraderechista Itamar Ben Gvir, porque no “maneja este tema con seriedad o profesionalidad”.
En cambio, lanza soluciones populistas de cuento de hadas y se absuelve de responsabilidad, afirmó la ONG al cuestionar varios de sus proyectos como la creación de la Guardia Nacional y los arrestos administrativos, que permiten detener a personas sin ordenes judiciales.
Los descendientes de los palestinos que no fueron expulsados de sus tierras tras la creación del Estado judío, en 1948, denuncian desde entonces que son tratados como ciudadanos de segunda.
En la actualidad ellos suman 1,9 millones de personas, casi un 21 por ciento del total de la población de este país.
Una encuesta realizada en marzo del pasado año reveló que el 94 por ciento de los árabes que viven en Israel sufrieron en alguna ocasión el racismo y la discriminación de la mayoría hebrea.
Según la investigación del Centro para la Religión, la Nación y el Estado, el 69 por ciento dijo ser objeto de racismo y discriminación en lugares públicos, mientras el 41 por ciento lo fue en instituciones académicas.