Beijing, 7 ene (Prensa Latina) China degradó hoy el nivel de manejo de la Covid-19 y eliminó más controles sanitarios para enfocarse en los casos graves y ampliar la vacunación mientras convive con la enfermedad y el virus que la provoca.
Desde las 00:00, hora local, de este domingo la Comisión Nacional de Salud identifica a la patología como “infección por un nuevo coronavirus”, en vez de “neumonía por un nuevo coronavirus” que usaba hasta ahora.
También cambió de A a B la categoría para gestionar la enfermedad, porque el microorganismo sigue mutando pero es menos virulento, mayormente causa síntomas leves, los contagiados se recuperan rápido y provoca pocas muertes.
Ello implica el fin de la exigencia de someter a aislamiento y realizar pruebas PCR a quienes llegan del exterior.
No obstante, los viajeros internacionales todavía necesitan resultados negativos de un test tomado 48 horas antes de arribar a China y usar mascarillas durante la travesía.
Las autoridades tampoco pondrán en cuarentena a los casos positivos, eliminaron el rastreo de los contactos cercanos y no designarán más áreas de alto riesgo por transmisión del coronavirus SARS-CoV-2.
Mantendrán los servicios de PCR para quienes deseen hacerse los exámenes y reajustaron la frecuencia de la publicación relacionada con la situación epidemiológica, que antes emitían a diario.
Además, el estado oriental normalizará la emisión de pasaportes y la concesión de visas.
Con estas decisiones China se alejó casi por completo de su estricta política de cero Covid-19 y comenzó a convivir con el virus, tal y como hace el resto del mundo.
En diciembre pasado el Gobierno revolucionó el mecanismo sanitario, desmontó muchas medidas y simplificó otras en función de garantizar el crecimiento socioeconómico y desterrar prácticas polémicas que causaron malestar en la población y destaparon protestas sin precedentes.
Pero todavía el país experimenta el peor rebrote de Covid-19 desde 2020 en Wuhan, que según expertos se debe continua mutación del coronavirus SARS-CoV-2, la llegada del invierno y la caída de la respuesta inmune en las personas vacunas.
La oleada disparó la cifra diaria a millones de infectados y aunque los muertos por la enfermedad también aumentaron, las autoridades sanitarias solamente contabilizan a quienes fallecen por problemas respiratorios o neumonía.
Ayer China presentó una actualización de sus protocolos epidemiológicos que remarca la vacunación y la protección personal como las principales medidas a seguir ante la persistencia de la Covid-19.
Pero ante el previsible aumento de viajes desde aquí, varias naciones decidieron imponer controles y exigir pruebas PCR a pasajeros procedentes del gigante asiático, alegando preocupaciones por un posible rebrote en sus territorios.
El Ministerio de Relaciones Exteriores criticó esas acciones, recalcó que cualquier medida debe tener fundamento científico, no debe usarse para la manipulación política, ser discriminatoria ni afectar el movimiento normal de personas.