CIUDAD DE MÉXICO.- “Estoy convencido de que vamos a salir adelante”, compartió su convicción en la noche de este domingo el Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, durante un emotivo encuentro sostenido en la Sede de la Embajada de Cuba en México, con un grupo de compatriotas que laboran en tierra azteca.
El mandatario fundamentó su afirmación en fortalezas como la sabiduría y el altruismo de un pueblo que no se rinde. Y lanzó una pregunta que a todas luces apuntaba a las grandes potencialidades de los hijos del país caribeño: “El día que superemos el bloqueo, ¿qué no seremos capaces de hacer?”.
Solo el trabajo, y hacerlo de modo distinto, hará posible a los cubanos salir del bloqueo imperial que cada día hace la vida más difícil. Esa reflexión que alude al corazón mismo de la existencia en el país caribeño fue compartida en la jornada de este domingo.
En el Salón Granma del emblemático edificio, el embajador de la Mayor de las Antillas en tierra azteca, Marcos Rodríguez Costa, ofreció un recibimiento marcado por el cariño y la familiaridad al Jefe de Estado, a su compañera Lis Cuesta Peraza, y a los integrantes de la delegación de alto nivel que ha llegado aquí, en visita de trabajo, para asistir a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum como Presidenta, y para sostener encuentros con amigos y personalidades.
Marcos Rodríguez expresó en los momentos iniciales del encuentro, que al Jefe de Estado le estaban ofreciendo la bienvenida más cordial los trabajadores de la Misión, los cónsules cubanos que trabajan en México; así como un grupo de empresarios de la Mayor de las Antillas, y un grupo de médicos que “representan muy bien a nuestros médicos”.
“Es un honor para nosotros contar con usted en el día de hoy”, expresó el experto diplomático al mandatario; y ese fue el punto de partida para que el Presidente cubano explicara un grupo de ideas, no sin antes reparar en la manera tan original en que comenzó la noche: con la alegría de los niños presentes en la Sede de la Embajada, quienes rindieron un original homenaje a José Martí.
Díaz-Canel dijo a los presentes: “Era para nosotros muy importante poder compartir con ustedes”. Y seguidamente dedicó sentidas palabras a Andrés Manuel López Obrador, quien, resaltó, “ha sido unos de los presidentes que más han hecho por Cuba”.
El dignatario fue enfático al hablar sobre el apoyo directo y coherente de AMLO; y confesó no olvidar lo que expresó el dignatario azteca cuando se produjo en Cuba el accidente en la Base de Supertanqueros de la provincia de Matanzas: a los hermanos no se les pregunta qué les hace falta; primero se les manda ayuda, y luego se les pregunta.
López Obrador siempre ha estado buscando maneras mediante las cuales Cuba pueda salir del bloqueo recrudecido. Así lo reconoció el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, quien no pasó por alto la ética, la manera de ser del amigo que dedicó muchas de sus Mañaneras a dar gracias a los médicos cubanos llegados a tierra azteca.
Cuba y sus batallas
“Vamos a hablar entonces de Cuba”, dijo Díaz-Canel Bermúdez en la Sede de la Embajada, y ese fue el inicio de una explicación sobre la situación compleja, sobre el bloqueo recrudecido que está viviendo el país caribeño. Y junto al abordaje de ese contexto difícil, el Jefe de Estado también habló de estrategias con las que cuentan el Partido Comunista y el Gobierno para revertir distorsiones y seguir adelante.
De las visitas a los municipios y a las provincias, de ese método que busca tocar con la mano cómo se están haciendo las cosas, habló el mandatario. Y ese fue el momento para extender una pregunta vital para los días que Cuba está viviendo: ¿Por qué unos rompen la inercia y otros no? ¿Por qué sucede de tal modo, si el bloqueo imperial gravita con su misma fuerza terrible en todos los ámbitos?
La producción de alimentos y la generación eléctrica son dos prioridades de primer orden sobre las cuales conversó el mandatario. Sobre el primer frente, recalcó que solo una mayor oferta hará posible impactar directamente en los precios; y que hay planes en el horizonte, como los que han nacido a partir de la ayuda de otros amigos firmes.
La explicación del Presidente, entre otras ideas, tenía que ver con que, en días recientes y en el contexto de la visita a Cuba del dignatario vietnamita, compañero To Lam, se han suscrito planes como el de Cooperación entre el Ministerio de la Agricultura de la República de Cuba y el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural de la República Socialista de Vietnam, sobre la Promoción de la Producción de Arroz para garantizar gradualmente la seguridad alimentaria en Cuba en el período 2025-2027, y hasta el año 2035.
Sobre el tema energético, el Jefe de Estado dijo que el año próximo tendrá lugar un proceso inversionista que mejorará la actual situación del país.
Hacia el final de sus palabras Díaz-Canel Bermúdez hizo referencia al significado que tiene México para la Mayor de las Antillas: “Este es un país importante, un país estratégico para Cuba”. Y enfatizó que en largo tiempo transcurrido, así en las buenas como en las malas, no ha habido quien haya podido romper la amistad: “Hay muchos hitos que nos unen, dijo, en la historia común de ambos países”.
Sobre AMLO volvió a expresarse el mandatario: Algún día, afirmó, los historiadores tendrán que escribir la historia de López Obrador como un amigo sincero de Cuba. Y a propósito de una historia marcada por la cooperación, recordó que nuestros médicos -más de tres mil actualmente en tierra mexicana- “han dado una lección de profesionalidad” ante un pueblo que ya los quiere y los reconoce.