Este viernes, cuando trece provincias del país y el municipio especial Isla de la Juventud transitan por el segundo día de la primera etapa de recuperación tras la epidemia, el Presidente de la República y el Primer Ministro encabezaron la habitual reunión vespertina con el grupo temporal de trabajo para la prevención y el control del nuevo coronavirus.
Cuando este viernes se informaron 176 241 pacientes positivos a la COVID-19 en el mundo, el mayor número para una jornada desde que el virus comenzó su propagación, en la Mayor de las Antillas trece provincias y el municipio especial Isla de la Juventud transitaban por el segundo día de la primera etapa de recuperación tras la epidemia y apenas se diagnosticaron 10 nuevos casos.
Internacionalmente las cifras continúan creciendo de manera exponencial, lo cual evidencia que el virus sigue teniendo una alta contagiosidad, aseguró el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, en la reunión del grupo temporal de trabajo para la prevención y el control del nuevo coronavirus que encabezan cada tarde el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz.
Ante tal realidad, el Gobierno cubano persiste en el empeño de mantener un estricto cumplimiento de las medidas que se han aplicado en el país, con el propósito de contener la enfermedad y proseguir el avance gradual por las diferentes fases previstas en la primera etapa de recuperación de la COVID-19.
Bajo ese propósito, en la cita de este viernes, donde también participó el vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa, los gobernadores de Santiago de Cuba, Camagüey y Pinar del Río dieron a conocer cómo han ido transcurriendo allí las primeras horas desde que pasaron a la fase I de la etapa de recuperación, en la que paulatinamente comienzan a restablecerse varias actividades de la vida económica y social de los territorios.
Al decir de la gobernadora santiaguera, Beatriz Jonhson Urrutia, en los últimos 51 días no se confirman en la provincia pacientes con la enfermedad y desde hace 33 no tienen ningún caso activo. Aseguró que todos los indicadores sanitarios establecidos por el Ministerio de Salud Pública para esta nueva etapa muestran un comportamiento favorable.
A partir de la implementación de las acciones correspondientes a la nueva fase –detalló- se mantiene un estrecho seguimiento a su implementación, para lo cual realizan recorridos diarios por los diferentes municipios. Además, dijo que se examinan en detalle las propuestas de actividades para el verano.
La provincia –afirmó- está en buenas condiciones para asumir esta fase I de la recuperación y tener bajo control la propagación de la COVID-19.
Desde Camagüey, la gobernadora Yoseily Góngora López señaló que el territorio se encuentra en una situación epidemiológica estable y cinco días atrás se confirmó el último paciente positivo a la enfermedad, pero su fuente de contagio fue en el extranjero. Máxima prioridad han concedido también en la nueva etapa a las acciones de pesquisaje y vigilancia para atender las infecciones respiratorias agudas y lograr el propósito de que no ocurra ninguna situación lamentable asociada a ellas, puntualizó.
En particular acerca el comportamiento de la fase I en el territorio, comentó que persiste un monitoreo y control constante en los 13 municipios, con la visita diaria a tres de ellos por parte de miembros del Consejo de Defensa Provincial, lo que permite tener un seguimiento sistemático sobre la implementación de las nuevas medidas.
Como es habitual en sus intervenciones durante este tipo de encuentros, Góngora López actualizó respecto a la recuperación de los daños provocados semanas atrás por el impacto de eventos climatológicos en varias viviendas, primero de los municipios de Céspedes y de Florida, y posteriormente de Esmeralda. La mayoría de estas afectaciones han sido ya solucionadas, aseveró.
De Pinar del Río se conoció, mediante el gobernador Rubén Ramos Moreno, que la provincia registra 33 días sin casos positivos a la COVID-19 y se aprecia estabilidad en la situación epidemiológica. Ante la nueva etapa en la que se encuentra el territorio, apuntó, se mantiene la atención a la población vulnerable y un riguroso control de las medidas higiénico-sanitarias.
Además, manifestó que se han creado grupos de trabajo para intercambiar con los municipios de manera constante acerca de cómo se desarrolla en ellos el tránsito por la nueva etapa, como parte de la cual ya se ha comenzado a reactivar el transporte entre los municipios y poco a poco recobran vitalidad diferentes servicios del comercio y la gastronomía.
Durante la videoconferencia, con sede en el Palacio de la Revolución, también rindieron cuenta La Habana y Matanzas, las dos provincias que aún no cumplen los cinco indicadores sanitarios aprobados para el paso a la fase I de la etapa de recuperación pos-COVID-19 y en las cuales se debe continuar actuando con todo rigor para poner bajo control la enfermedad.
El gobernador matancero, Mario Sabines Lorenzo, recordó que en el territorio se acumula en total 202 casos positivos desde el inicio de la epidemia, y solo dos en los últimos quince días. Explicó sobre de las acciones que se realizan para garantizar el cumplimiento de las medidas de la etapa de enfrentamiento a la COVID-19, con el consecuente llamado a la disciplina y al distanciamiento social.
A su vez, afirmó que también se puntualizan determinadas acciones que corresponden a la etapa de recuperación, lo cual permitirá ir poniendo a punto diferentes instituciones y escenarios para el momento en que se decida el paso a la nueva etapa.
En tanto, sobre La Habana, donde continúa activa la mayor cantidad de casos, la vicegobernadora Yanet Hernández Pérez especificó que a la provincia corresponden los 10 pacientes reportados este viernes en el país. Cinco de ellos, señaló, no tienen fuente de infección demostrada, de los cuales cuatro fueron identificados como parte de la pesquisa intencionada que se realiza en diversas áreas.
La compleja situación epidemiológica que se aprecia hoy en la capital cubana motivó la reflexión del Presidente Díaz-Canel acerca de la necesidad de mantener la disciplina en todos los escenarios. La Habana –subrayó- tiene que mantenerse con las mismas restricciones que se implementaron desde que comenzó el enfrentamiento a la COVID-19, pues el territorio no ha cambiado de etapa.
A pocas horas del domingo, cuando en la Mayor de las Antillas celebraremos el Día de los Padres, el Jefe de Estado convocó a la población a no relajar el cumplimiento de las medidas. El pueblo habanero tiene que ser consciente –comentó- de que en estos momentos continuamos bajo una restricción de la movilidad, que exige aislamiento social y distanciamiento físico, porque de lo contrario no terminaremos de controlar la situación en La Habana.