La Habana, 16 jul (ACN) El cubano Maikel Massó clasificó este viernes a la final del salto largo en el XVIII Campeonato Mundial de atletismo con sede en Eugene, Estados Unidos, hasta el próximo día 24.
Masó, medallista de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, logró el último boleto finalista por los “pelos” con marca de 7.93 metros (m).
Con ese resultado el atleta de Cuba se convirtió en el invitado número 12 a la discusión de las medallas en esa prueba, en la que tiene como mejor cota de la temporada 8.14 m en el mes de mayo y de por vida 8.39 m el pasado año.
Otro que avanzó a la final fue el griego Miltiadis Tentoglu (8.03 m), monarca en la cita estival de la capital japonesa; mientras el jamaicano Tajay Gayle, campeón en el certamen universal de Doha 2019, quedó eliminado al irse sin registro válido.
También en el estadio Hayward Field el velocista de la isla Shainer Reginfo no pudo acceder a las semifinales de los 100 metros planos (m/p), al terminar sexto en el cuarto heat eliminatorio con tiempo de 10.21 segundos.
No obstante, para el joven Reginfo, ganador de la presea de bronce en el Mundial juvenil de Nairobi, Kenia, en 2021, el solo hecho de participar en la lid de Eugene es una experiencia que le servirá de mucho para futuros compromisos.
Además, todavía le falta por competir en los 200 m/p en las próximas jornadas de ese evento mundialista.
Este viernes, el primer cubano en debutar fue el saltador de altura Luis Enrique Zayas, campeón de los Juegos Panamericanos de Lima 2019, quien se incluyó en la final de su especialidad.
Zayas, ocupante del quinto lugar en la cita del orbe de Doha, tuvo una etapa clasificatoria casi perfecta y se ubicó entre los 13 finalistas con marca de 2.28 m, la misma conseguida por otros 10 atletas.
En su secuencia de saltos el santiaguero logró en su primer intento superar los 2.17 m, para luego pasar a los 2.21 m, altura en la que falló en su primera oportunidad, pero la pudo vencer en su segunda tentativa.
Después sobrepasó los 2.25 y 2.28 m en sus saltos iniciales, para asegurar así su presencia en la final, como hizo hace tres años en suelo catarí.