Baraguá, Ciego de Ávila.–«El plátano nunca es viejo; no se trata de demolerlo, sino de recuperarlo». Así, con esa sabiduría natural que tienen los que no se han despegado de la tierra, habló ayer, al Presidente Díaz-Canel, el director general de la Empresa Agropecuaria La Cuba, Ricardo Varona.
Los que han visto el desarrollo de los cultivos, los que saben auscultar los ritmos del crecimiento, marcados por los soles y las lunas, por cada temporada, saben que la tierra es el punto de partida para resolver muchos de los problemas que golpean a Cuba. Con hombres como Varona, y con otros como él –contando a las mujeres– conversó el mandatario, al visitar el municipio de Baraguá.
La empresa, que había sufrido pérdidas millonarias en 2022, logró revertir ese panorama el año pasado: tuvo ganancias, a pesar de que 2023 fue duro. Allí, donde el fuerte es el plátano, sus trabajadores se han propuesto mantener 400 hectáreas sembradas.
En ese amplio espacio de tierras, al cual llegó el Jefe de Estado, acompañado del miembro del Buró Político y secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista, Roberto Morales Ojeda, se habló sobre la posibilidad de intercalar cultivos, o sobre el valor del uso de bioproductos.
Ricardo Varona comentó que la empresa tiene un plan creciente de producción que apunta hasta 2030, cuando deberán cultivarse unas 3 000 hectáreas de plátano. Este año, dijo el directivo, debe ser el de consolidar logros.
Luego, el dignatario fue al encuentro de un ingeniero agrónomo, recién graduado, quien lidera, dentro de la empresa, un proyecto de abono a partir de lombrices. Leonardy Paz Velázquez, especialista en suelos y fertilizantes, mostró lo que se hace. Todo comenzó con un kilogramo de lombrices, y hoy pueden ser alimentados cultivos y animales con una dosis muy acrecentada del biofertilizante.
En otro punto de la empresa, en la cooperativa de producción agropecuaria (cpa) Paquito González, al escuchar explicaciones sobre cómo se prepara la tierra para que ella ofrezca los mejores frutos, Díaz-Canel preguntó: «¿Ustedes no están bloqueados? ¿Cómo logran estas cosas?». Y respondió: «Trabajando…».
CON EL PUEBLO, SOBRE LAS PROYECCIONES
«Ahí están los cuadros del municipio y los cuadros de la provincia, y estamos viendo cuatro prioridades fundamentales», dijo Díaz-Canel en la calle, en un encuentro con el pueblo del municipio de Baraguá. Las detalló: «cómo seguimos forjando la unidad del pueblo, a partir del planteamiento que hizo el General de Ejército en el discurso del aniversario 65 de la Revolución; cómo vamos a asegurar políticamente la implementación de las medidas económicas que se anunciaron y se aprobaron en la Asamblea Nacional; cómo vamos a ir a una discusión permanente de un grupo de tendencias negativas que tenemos en la sociedad; y cómo fortalecer la labor ideológica».
El Jefe de Estado expresó que, en febrero, volverán a realizar un recorrido similar, en composición del Gobierno, para evaluar cómo se va a implementar el plan 2024 del presupuesto en cada territorio.
«Sé que hay mucha preocupación, porque estamos viendo los estados de opinión, todos los días, de la población ante las medidas económicas». Recordó que la única medida aplicada ha sido el incremento del salario a los médicos, al personal de la Salud, y a los trabajadores de la Educación: Cada medida que se vaya a aplicar –argumentó–, se aplicará cuando estén creadas las condiciones, para que se puedan llevar adelante correctamente. Y cada medida –subrayó– lleva un grupo de especificaciones, para evitar que las personas en situación de vulnerabilidad sean afectadas.
Díaz-Canel afirmó que, aun cuando ministros y otros dirigentes han estado explicando públicamente el sentido y el alcance de las medidas, «siempre surgen dudas, y ahora se va a seguir explicando», y aseveró que son decisiones «necesarias para poder empezar a ordenar la economía».
Ordenando la economía, argumentó, «podemos ir avanzando más en la solución de otros problemas en la sociedad». Compartió ejemplos de preocupaciones en el ámbito popular; y sobre las tarifas del consumo de electricidad, fue enfático en que «no afecta a la mayor parte de la población: la medida es necesaria porque hay gente que consume más, y porque, para generar electricidad, necesitamos combustible que nos cuesta muy caro».
Acerca de las tarifas del transporte, recordó que, en aquellos servicios de mayor uso por la población, no sube el precio, «porque la diferencia entre la tarifa y el precio a la población la va a asumir el Presupuesto del Estado». Es el caso del transporte urbano.
Díaz-Canel preguntó: «¿Por qué tenemos que subir las tarifas?». Explicó, entre otras causas que, por el incremento de los precios de los insumos para mantener el transporte, quienes trabajan en las empresas del transporte urbano casi no perciben utilidades.
Tal realidad –fundamentó– afecta la operación de las empresas, y la disponibilidad de salarios estimulantes; por lo tanto, con la medida, «esas empresas empiezan a recuperarse; se acercan más a la economía real».
Las medidas, resaltó, «están pensadas, por un lado, para potenciar la economía; y por otro, para beneficiar a la población, en ningún momento para afectarla». Hizo énfasis en que, «además de las dudas, hay mucha campaña tergiversando», y «eso va creando desconfianza, y nosotros, al contrario, todo lo que estamos haciendo es para que crezca la esperanza, para que crezca la confianza, para que crezca la seguridad».
Ante los pobladores de Baraguá, el Presidente hizo un anuncio importante: En próximos días se va a hacer un proceso de discusión sobre las medidas, con más profundidad, en todas las organizaciones de base del Partido y de la Juventud, en todos los colectivos laborales, en todas las estructuras de las organizaciones; y ahí también, dijo, la población podrá comprender mejor, recibirá información más actualizada sobre las medidas, y sobre todo se podrá opinar y proponer para que «podamos mejorar la situación». «Necesitamos que 2024 sea un año en el que empiece a cambiar la situación que hemos vivido en los últimos tres años, por las causas que ustedes conocen, conscientes de que no va a aflojar el bloqueo; pero con nuestro propio talento, con nuestro propio esfuerzo, tenemos que ser capaces de irnos por encima del bloqueo».
El Jefe de Estado analizó que «cada vez que uno va a una provincia o a un municipio ve ejemplos de personas y de colectivos que, aun en las circunstancias del bloqueo, son capaces de hacer las cosas bien, trabajando». Recalcó que, «si esos rompen el bloqueo, si esos todos los días nos inspiran a superar el bloqueo, ¿por qué nosotros no lo podemos hacer?».
OTRAS EXPERIENCIAS LOABLES
En Baraguá, el central refinería Ecuador impresiona por su enormidad. De los cuatro que tiene la provincia de Ciego de Ávila, es el único que ha comenzado a moler. En ese mundo de vapores, marcado por la intensidad del trabajo y el olor de la melaza, volvió a aflorar la verdad de que, cuando una fábrica echa a andar y el trabajo lo impregna todo, no hay mucho espacio para la desesperanza.
En el círculo infantil Florecitas martianas, una niña recibió al Presidente, y a quienes lo acompañaron, con versos de la poetisa Carilda Oliver Labra, dedicados a Fidel. Había memorizado los versos, a pesar de que el texto no es breve. Así empezó un recorrido en el cual el mandatario indagó por la alimentación de los más de 140 infantes, de uno a cinco años de edad.
En la sede municipal del Partido se reunió con autoridades del territorio, para analizar cómo se concretan allí las prioridades trazadas por la dirección del país en lo económico, político y social. Antes de entrar al recinto, Díaz-Canel diálogo con un grupo de estudiantes del preuniversitario José Martí, quienes lo recibieron en los surcos de un organopónico.
El análisis en la sede del Partido fue autocrítico, y dejó en claro cuáles son las potencialidades del municipio para ir superando las adversidades. Especial reflexión dedicó Morales Ojeda al valor que entrañan el trabajo político-ideológico y la labor de la militancia para superar los desafíos presentes, y sobre los jóvenes, destacó la importancia de sumarlos a las tareas de primer orden.
El Presidente resaltó el valor de la unidad, y trajo a colación conceptos recientemente pronunciados por el compañero Raúl, y también por el primer ministro, Manuel Marrero Cruz, referidos a cómo combatir en la sociedad presente.
Finalmente, hizo explícita su convicción de que, con fuerzas e inteligencia propias, Cuba puede ir más allá de la resistencia rasa, puede crear e incluso aspirar al bienestar y a la felicidad, a pesar del cerco genocida que representa el bloqueo imperial.