Donde la Revolución me necesite ahí estaré yo

Foto Lilian Salvat
Foto Lilian Salvat

“Sabemos que nuestro aporte a las tareas de orden social es necesario para la continuidad de esta Revolución, y toda su obra en beneficio de la sociedad”, comenta Laritza Marian Lovelle Alejandre, estudiante de medicina de la Facultad de Ciencias Médicas Celia Sánchez Manduley de esta ciudad.
“Desde muy pequeña siempre me ha gustado estar en la primera fila; en mi familia me dicen que soy medio sobresaliente pero lo cierto es que me gusta estar como se dice en toda; pero no en cualquier cosa, me gusta estar en cosas de importancia, en algo útil.
Este año que está a punto de concluir ha sido un período muy intenso; la aparición de la pandemia generada por el nuevo coronavirus, nos ha hecho trabajar arduamente en varios renglones, primero en las pesquisas activas, una de la tareas más importantes que he realizado en toda mi vida y de la que atesoro recuerdos imborrables.
Aparejado a esto las labores productivas que revierten gran valor en estos tiempos donde el llamado de la máxima dirección del país es a producir y sustituir importaciones.
Muchas son las anécdotas que guardo de todos estos momentos en que he servido a mi nación, el más grande es el hecho de haber escrito las lindas páginas del enfrentamiento y prevención de la COVID – 19, enfermedad novedosa que cobra la vida de millones de personas en el mundo, y obligó a paralizar el curso habitual de la vida en todo el orbe.
El cariño de las personas que nos esperan cada mañana para saludarnos y preguntarnos cómo estamos; el hecho de poder ayudar a los ancianos que viven solos, algunos hasta nos piden que le tomemos la presión, eso nos enorgullece porque ya la gente nos ve como médicos
Algo que me sucedió y confieso que sentí un poco de temor fue cuando detectaron el primer caso positivo aquí en Manzanillo, la doctora que lo atendió vivía en nuestra área de pesquisaje , a ella se la llevaron al aislamiento y se valoró en algún momento en llevarnos a nosotros también, pero para nuestra tranquilidad su PCR fue negativo, en ese tiempo sentí una vez más, que no era cosas de juego a lo que nos enfrentamos, que todo cuidado es poco, máxime si se tiene en cuenta que un gran porciento de los diagnosticados en el país son asintomáticos, esta enfermedad no tiene cara, pero siempre mantuve y mantengo mi disposición de ayudar en todo lo que sea necesario, donde la Revolución me necesite ahí esteré yo».