Manzanillo. Mayo 7.- Durante quince años en el Hospital Pediátrico Hermanos Cordové de Manzanillo se han vivido importantes logros relacionados con la Unidad de Fibrosis Quística de Granma, ubicado en este centro médico.
En este programa de salud que mejora y eleva la calidad y esperanza de vida de niños y jóvenes fibroquísticos en la provincia ya se han atendido unos 26 pacientes, que “dentro de sus principales manifestaciones clínicas, aclara la doctora Sordelicia Mustelier, jefa de la Unidad provincial Fibrosis Quística, tenemos que estos niños tienen una sudoración profusa, o sea, sudan mucho”.
“El sudor de estos pacientes es salado y en muchas ocasiones se les pueden llegar hacer cristalitos de sales en la frente e infecciones respiratorias a repetición que no resuelven con el tratamiento convencional”.
“En la actualidad brindamos nuestros servicios a 19 enfermos pertenecientes a los municipios Manzanillo, Bayamo, Guisa, Jiguaní, Media Luna y Niquero”, agrega la doctora.
La atención especializada a los aquejados con la enfermedad comenzó en abril de 2003 y quince años después el equipo multidisciplinario de especialistas siente el gozo de mejorar la calidad y esperanza de vida de estos pacientes, seis de los cuales supera los 16 años de edad y uno rebasa las tres décadas de vida.
Uno de ellos es el joven Ennis Reyes León quien refiere que actualmente se siente bien de salud, “normal, fuerte, saludable, gracias a los pediatras y a los doctores. Desde los siete años no he tenido más ingreso por esta enfermedad y ya tengo 16”, dijo.
El equipo multidisciplinario de este hospital, pacientes que han recibido atenciones aquí y los que actualmente necesitan de los cuidados especiales, así como sus familiares y pioneros de la Escuela Secundaria Básica Urbana (ESBU) Manuel Fajardo Rivero celebraron juntos el decimoquinto aniversario de este programa.
Durante los festejos no faltaron las lágrimas de agradecimiento tanto de padres como de otros familiares, por tanta dedicación y amor a estos niños y jóvenes que, cuentan con su salud garantizada.
“Sin la familia no es posible lograr la atención de nuestros profesionales con estos pacientes, que han logrado revertir muchas de las complicaciones que se pudieran presentar más a corto plazo”, dice la doctora Lucy Rosabal, directora del Hospital Provincial Pediátrico Hermanos Cordové.
Este servicio médico integrado por profesionales dotados de una gran sabiduría, constancia y sensibilidad humana, llena de orgullo al ejército de las batas blancas del territorio y sin lugar a dudas cuando se hablen de logros en la salud pública en nuestro territorio, debemos mencionar a este como uno de ellos.
