Lixandro se va para la zona roja

Lixandro del Toro Navea es uno de los jóvenes manzanilleros que se encuentran listos para asumir el reto de brindar apoyo en las zonas rojas de los centros de aislamiento //Foto Eliexer Pelaez Pacheco
Lixandro del Toro Navea es uno de los jóvenes manzanilleros que se encuentran listos para asumir el reto de brindar apoyo en las zonas rojas de los centros de aislamiento //Foto Eliexer Pelaez Pacheco

Manzanillo. Marzo 10.- Uno de los jóvenes manzanilleros que pronto estará enfrentando directamente a la COVID-19 en la zona roja de la sede Peralejo de la Universidad de Granma es Lixandro del Toro Navea, estudiante del segundo año de la licenciatura en educación Biología del campus Blas Roca Calderío.


Mañana será el cumpleaños de este valiente muchacho acreedor de la condición Jóvenes por la vida que otorga la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) a quienes han tenido una destacada participación en el combate contra la actual pandemia, y lo pasará en una de las misiones más importantes de su corta edad.


Al asumir la convocatoria que se le hizo para sumarse a esta tarea y conversarlo en el hogar, tuvo apoyo de sus familiares. «Se lo comenté a mis padres y de inmediato respondieron con orgullo que sí, que lo asumiera con mucha responsabilidad pero que me cuidara y tomara todas las medidas necesarias para no contagiarme», agregó.


El comprometido joven antes de partir a la misión aprovecha también la oportunidad para transmitir un mensaje a los manzanilleros. «Pedirle que se cuiden mucho cumpliendo estrictamente con todas las medidas higiénico sanitarias establecidas por el Ministerio de Salud Pública, como el lavado correcto de las manos, el distanciamiento social y el uso correcto de la mascarilla. Evitar también salir innecesariamente de las casas para tratar de controlar los contagios en el territorio», concluyó del Toro Navea.


Sobre el significado que tiene para él la condición Jóvenes por la vida confesó que «en estos tiempos de contingencia en los que estamos viviendo, obtener este galardón para mí significa sobre todo tener amor por la Patria, ser un joven revolucionario en la actualidad cuando la nación más necesita del apoyo incondicional de nosotros», resaltó.


Lixandro ha vivido constantes jornadas de entrega y sacrificio sobre todo desde el año pasado cuando comenzamos este enfrentamiento al nuevo coronavirus Sars-Cov-2. Él junto a otros bisoños han protagonizado varias acciones que demuestran el valor de las nuevas generaciones de cubanos. Una de estas es el apoyo a las personas vulnerables.


«Ha sido algo bonito ayudar a estas familias y a los ancianos que tengan una enfermedad de base que les imposibilite salir a las calles a buscar sus alimentos y los productos de primera necesidad, es en este momento en que la juventud ha dado el paso al frente», dijo Lixandro.


El entregado muchacho valora el trabajo realizado por los miembros de las brigadas Jóvenes por la vida de muy positivo pues «no sólo somos nosotros los de la Universidad de Granma los que ayudamos con la prestación de servicios a los necesitados, también los estudiantes de las ciencias médicas en las pesquisas activas. En estos grupos se ha creado como una amalgama muy bonita entre todos los bisoños para enfrentar la tarea».


Con todas estas experiencias Lixandro ahora está listo para asumir el llamado de incorporarse a la zona roja a brindar otro aporte allí directamente a los pacientes y sospechosos de padecer la COVID-19.

«Confesarte que en un principio siento un poco de nervios y de miedo porque me voy a enfrentar cara a cara a la COVID-19.
Allí estaremos con los casos reportados positivos y a los que estarán bajo vigilancia, por lo que considero que lo primero es que debemos tener el valor suficiente para enfrentar la tarea que será dura, pero bonita a la vez, porque ayudaremos a esas personas que estarán alejados de sus seres queridos».


En Manzanillo varios jóvenes como Lixandro ya confirmaron su voluntad de sumarse a las zonas rojas y brindar el aporte necesario en estos sitios. Hoy muchos ya están en la primera línea de combate frente a la COVID-19 responsabilidad que asumen con compromiso, entrega, dedicación y entusiasmo.

Estos bisoños no defraudan así la confianza que nuestro país deposita en ellos, y demuestran que son capaces de enfrentar grandes retos a favor de todos.