Manzanillo. Enero 13.- A preservar la vitalidad productiva, ponderar la calidad y el encadenamiento con otros actores de la economía, como parte de la estrategia para la transformación de la industria cubana, instó el ministro Eloy Álvarez Martínez en esta urbe, en su recorrido por entidades del sector como parte de la visita gubernamental a Granma.
En la Fábrica de Acumuladores XX Aniversario, única de su tipo en el país, el titular instó a la implementación de un programa exacto que permita la sustitución del plomo de procedencia foránea, con la incorporación de materias primas nacionales, y disminuir el componente importado que hoy representa más del 80 por ciento del requerido para las baterías Taíno.
Apostar por la ciencia e innovación, y aplicar alternativas que generen una garantía de producción, como respuesta al mercado nacional, y de satisfacción de los trabajadores, junto a las microinversiones, permitirán a esta entidad adscrita al Grupo Empresarial de la Industria Sidero Mecánica, dijo «con inteligencia, audacia, y con menor financiamiento, considerando la situación financiera cubana, garantizar la sostenibilidad de la planta».
Para lograr la meta de las 60 mil baterías del calendario en curso, se supone trabajar con agilidad y productividad señaló, a la vez que se considere la cultura industrial para la recuperación integral de la fábrica con el aprovechamiento de cuanto puedan aportar los nuevos actores de la economía, lo que responde íntegramente a la estrategia económica nacional en pos del desarrollo.
Álvarez Martínez catalogó de estimulante el recorrido por las tres Unidades Empresariales de Base de la Empresa de Aluminios Mecánicos (ALUMEC), donde constató el compromiso de avanzar en las líneas de perfilería de acero cerrado y galvanizado, carpintería de acero galvanizada y de aluminio, accesorios como los manipuladores, y las ideas para identificar que las recorterías no son desechos, sino materias primas para otras producciones, generar empleo e ingresos.
Allí conoció de las proyecciones de la otrora fábrica de tubos para riego, fundada por Fidel en 1977, de poner en funcionamiento dos máquinas laminadoras que concretarán la obtención de los tubos de acero de 167.3 milímetros para las máquinas de riego de pivot central indispensables para la agricultura, en las que el 70 por ciento lo representan las tuberías.
Según explicó Bladimir Matilla, director adjunto de ALUMEC, «produciremos este tubo de 11 metros de largo, de 6 5/8 pulgadas, con peso de 147 kilogramos, cuya importación hoy genera sólo por concepto de flete una gran suma de dinero, pues el 50 por ciento de lo que importa es aire».
El ministro, también ingeniero industrial, valoró como estratégico el rescate de esta línea productiva en Manzanillo por su impacto para la industria, la economía en el orden de la sustitución de importaciones y la agricultura.
Referente a las producciones como los escabeles, bases para refrigeradores, banquetas de aluminio, portarretratos y búcaros de cristal u otros, dijo es lo que requiere la economía, pensar diferente, buscar soluciones, y enfocarse en esas obtenciones que aparentemente alternativas son las que demanda la población.
La Unidad Básica Tenería y pieles de la ciudad del Golfo de Guacanayabo estuvo incluida en el recorrido al que le acompañaron el director del Grupo Empresarial de la Industria Sidero Mecánica, la integrante del Consejo de Estado Felicia Martínez Suárez y directora de ALUMEC, y el diputado manzanillero al Parlamento cubano Yoandris Despaigne Videt.
Allí el Ministro de Industria llamó a ampliar la búsqueda de vías que permitan el aprovechamiento máximo de las pieles curtidas en existencia en el lugar, con más tiempo del previsto, para que generen aportes a la economía y favorezcan los encadenamientos entre los diferentes actores.
En la UEB de proceso y venta de la Empresa de Recuperación de Materias Primas, Eloy Álvarez se pronunció por acercar a la población, al barrio, la recuperación de aluminio, chatarra, cartón, vidrio, «de manera efectiva, rápida, en vínculo con los nuevos actores de la economía, para que no se convierta en desecho lo que pudiera ser materia prima de una producción económica».
A la vez se proyectó por la humanización del trabajo con la recuperación de la grúa con varios años de explotación y hoy en desuso, e instó al colectivo a sentirse parte de las soluciones para ir restando tamaño a los problemas.
Valoró que «se aprecia espíritu de trabajo, compromiso, deseos de continuar avanzando en cada una de las entidades, y perspectivas de lograrlo».