Cuba llevará adelante un proceso de ordenamiento monetario complejo, y aunque permitirá corregir muchos problemas de la economía, también implicará riesgos como la ocurrencia de una inflación mayor de la diseñada, para hacer frente a lo cual se prevén un grupo de medidas.
Marino Murillo Jorge, jefe de la Comisión de Implementación de los Lineamientos, explicó que entre ellas está prevista la centralización de determinados precios mayoristas de productos transversales a la economía y otros de primera necesidad (42), entre ellos los combustibles, la energía, agua y alcantarillado, cemento, azúcares, alcoholes y transportación de carga.
Se incluyen también los aceites comestibles, la harina de trigo, el pan (surtidos seleccionados), la leche en polvo, colchones de línea económica, palanquillas, mieles, así como los de los productos agropecuarios (30).
Murillo Jorge explicó detalladamente lo que ocurriría con los productores agropecuarios, para quienes se garantizará el mismo nivel de utilidad por tonelada que en la actualidad.
Señaló que además se aprobarán determinados precios de manera descentralizada, pero con límites, los cuales progresivamente serán levantados.
En cuanto a los minoristas, dijo, también habrá acciones de contención con precios centralizados.
Respecto a las formas de gestión no estatal, afirmó que también se proponen mecanismos de acuerdo del valor de las mercancías, lo cual se debe debatir a nivel de base.
Aun cuando existirán crecimientos de costos asociados a materias primas, insumos y salario, también habrá reducción en la carga tributaria, por ejemplo, se sube el mínimo exento y el gasto deducible, precisó Murillo Jorge.
La intervención del Jefe de la Comisión de Implementación de los Lineamientos tuvo lugar el martes último en el Palacio de Convenciones de La Habana para los diputados de la Asamblea Nacional del Poder Popular, la cual fue transmitida en el espacio radiotelevisivo Mesa Redonda.