¿Qué es lo más fácil de hacer ante las dificultades económicas reflejadas en escasez de materias primas, disminución de importaciones y aumento de la inflación? Cruzar los brazos y decir que no hay recursos… Precisamente esa actitud es la que pretenden menguar empresas del Ministerio de Industrias (Mindus), cuyas producciones principales se han visto afectadas por la adversa situación económica de los últimos años.
Las producciones alternativas han sido un método para generar nuevos ingresos y contenido de trabajo para la fuerza laboral. Gracias a ellas, al cierre de octubre de este año se reportaban ventas de más de 800 millones de pesos, en 43 empresas del Mindus con alrededor de 600 surtidos, informó a Cubadebate Katherine Montes Padrón, directora general de Control y Análisis Financiero del Ministerio de Industrias.
“Nuestras empresas generan recorterías como parte de su proceso productivo, que se han empleado como materias primas para producciones secundarias. Estas son comercializadas en diferentes puntos de venta, y han tenido gran aceptación por parte del pueblo”, dice.
Destacan, según la directiva, los cinco millones de unidades físicas con material reciclado producido por la industria ligera, que ha representado un ahorro estimado de 1 000 000 USD.
“En la empresa Vitec, los desperdicios del vidrio se trituran y se venden a los artistas del Fondo Cubano de Bienes Culturales que trabajan la cerámica. Mientras, la Empresa del Papel genera recortería en el proceso de conversión de bobinas en pliegos, que se reutiliza en la confección de productos terminados, como cajas para pizzas, jabas, bolsas, tarjetas de estiba, files, carpetas para archivos, carátulas para agendas y sobres de diferentes tamaños”, ejemplifica.
Lo anterior estimula la producción nacional y la sustitución de importaciones, en un escenario donde, al cierre de 2022, aproximadamente el 54% de lo consumido en Cuba se producía dentro de nuestras fronteras, según trascendió en la Mesa Redonda del 13 de junio pasado.
Las producciones alternativas han incidido favorablemente en los resultados económicos del sistema empresarial; e implican un avance en la autogestión de cada entidad, en la disminución de importaciones y en el incremento de la participación de la industria en la satisfacción de las demandas de la población y la economía.
Dicho en otras palabras, son una manera de producir con lo que se tiene, y beneficiar a la entidad productora y a la sociedad. La composición de estos artículos varía en dependencia de las posibilidades de cada empresa; y en su versatilidad radica su riqueza.
Mediatex: Confección de artículos textiles para el hogar
Los trabajadores de Mediatex tejen manualmente sus producciones alternativas. Foto: Cortesía de Haikel Acea Consuegra.
La empresa Mediatex ya cuenta 13 años de historia. Perteneciente al Grupo Empresarial de la Industria Ligera (Gempil), es una entidad de capital mixto irlandés-cubano, que tiene como objeto social básico la producción, distribución y comercialización mayorista en Moneda Libremente Convertible (MLC) de medias, calcetines, plantillas y otras confecciones textiles similares.
Su director general, Haikel Acea Consuegra, recuerda que las producciones alternativas comenzaron en 2022 de manera organizada, con un procedimiento de pago por destajo por acuerdo.
De ese modo, “se comenzaron a fabricar cintillos de pelo y, con el desperdicio del proceso, los trabajadores empezaron a tejer manualmente alfombras de diferentes formas y tamaños, agarraderas para utensilios calientes, porta calderos y porta sombrillas, todos con una gama de colores que permitía distintas combinaciones”.
Los productos alternativos que confecciona Mediatex son textiles y se comercializan de forma mayorista, en CUP, a entidades con ventas minoristas.
“Hasta la fecha nuestros artículos han tenido buena aceptación”, dice el director general, y reconoce que lo más complejo es poner de acuerdo a quienes tejen con la distribución de las tiritas de recortería por gama de colores. “Lo más satisfactorio es ver la acumulación de las producciones resultantes, que son realmente hermosas”.
Para Mediatex, las producciones alternativas ayudan a completar el cierre del ciclo productivo y de aprovechamiento de las materias primas procesadas. “Todos salimos ganando, porque reportan un ingreso para la empresa y para el trabajador en su estimulación salarial, al tiempo que aportan a la estética de los hogares del consumidor final”, afirma Acea Consuegra.
Las agarraderas son algunas de las producciones alternativas de Mediatex. Foto: Cortesía de Haikel Acea Consuegra.
Empresa Industria Electrónica: Incursión en los productos plásticos
La Empresa Industria Electrónica comercializa artículos plásticos como cajas, cubos, paletas de ventiladores, entre otros. Foto: Enrique González Díaz/Cubadebate.
Como Mediatex, la Empresa Industria Electrónica (EIE) también ha incursionado en las producciones alternativas.
Según Edel Gómez Gómez, su director general, las 43 medidas para el fortalecimiento de la empresa estatal socialista marcaron un punto de giro decisivo en la transformación de la industria, pues permitieron expandir su objeto social y le posibilitaron adentrarse en otras actividades.
Posteriormente, la compra de materia prima reciclada a los nuevos actores económicos y la recuperación de moldes y maquinarias sentaron las bases para que en la tienda de la EIE se comercialicen hoy, junto a una cocina de inducción o una cajita decodificadora; peines, cubos, paletas de ventiladores y otros artículos plásticos.
El año pasado la industria no realizó importaciones, pero, gracias a estrategias como las producciones alternativas, logró ventas por encima de los 300 millones de pesos, afirmó Edel Gómez en el video de balance de la institución de 2022.
“Pasamos a estas otras producciones por una necesidad propia, pero también para satisfacer demandas del país. Igualmente, pusimos empeño en líneas de desarrollo como los servicios de reparación y mantenimiento, la eficiencia energética y el aprovechamiento de fuentes renovables de energía, brindando especial importancia a la economía circular.
“Por nuestra experiencia, creemos que se debe incentivar la revolución de las energías renovables, pero también la revolución de la remanufactura y del trabajo con los desechos sólidos, que tienen gran importancia para nuestra industria”, explicaba recientemente a IDEAS Multimedios.
Para Edel Gómez, la EIE es un organismo moderno, que busca, al mismo tiempo, nuevas formas de existir y dar continuidad a los propósitos para los que fue creado, sin olvidar su encargo de tributar a la sociedad y aportar al barrio donde radica.
Grupo Empresarial del Reciclaje: Reinvención y avance
Local fabricado con madera plástica (100% plástico reciclado). Foto: Grupo Empresarial del Reciclaje.
El Grupo Empresarial del Reciclaje tradicionalmente ha sido el encargado de recuperar, procesar y comercializar residuos y materiales reciclables. En 2022 se reutilizaron 153 000 toneladas de materias primas en el país; de las cuales alrededor de 111 000 fueron recuperadas por esa entidad.
Gracias a las 43 medidas destinadas a la empresa estatal socialista, el grupo incursionó en las producciones alternativas entre los años 2020 y 2021. También influyeron otros factores, como la disminución en la circulación de productos, por la crisis poscovid y el recrudecimiento del bloqueo, que originaron una caída en la generación de residuos y materiales reciclables.
“Necesitábamos incrementar los ingresos con la venta de menos materiales, para lo cual debíamos aumentar el valor agregado de los productos que recuperábamos”, explica Julio Sardiña Bueno, director de Calidad y Comunicación del Grupo Empresarial del Reciclaje.
Lo anterior contribuyó a que, a partir del plástico reciclado, se fabricaran tuberías, mangueras, conexiones hidráulicas, cubos, potes, vasos, platos, entre otros. “También, como producciones alternativas, empezamos a clasificar al detalle los materiales reciclables que antes eran comercializados como chatarra o residuos. Es el caso de las cajas de cartón, envases plásticos, tuberías, angulares, laminados de acero, etc”.
Para las empresas dedicadas al reciclaje, la venta de los productos alternativos ha aportado 87 millones de CUP entre enero y octubre de este año; mientras la productividad se ha duplicado con respecto al mismo período de 2022 y el salario medio de los trabajadores (de 5960 pesos) creció en 68%, afirma Sardiña Bueno.
Al mismo tiempo, el medio ambiente se favorece con la disminución de residuos en los vertederos; y se hace llegar a las personas artículos de alta demanda, deficitarios en el mercado, a un precio menor que otras formas de gestión no estatal y que otros productores industriales cuyo trabajo se realiza con materias primas vírgenes.
Sardiña Bueno reconoce que, aunque es sencillo obtener las materias primas secundarias 100% recicladas -que recupera la propia organización a través de sus procesos tradicionales-, resulta muy exigente fabricar estos productos alternativos sin realizar las inversiones requeridas en equipamiento. Esto ha demandado ajustes importantes a maquinarias dadas de baja técnica por otros organismos, para ponerlas a funcionar.
Entre las entidades líderes en cuanto a producciones alternativas en el grupo empresarial, destaca la Empresa de Recuperación de Materias Primas de Villa Clara. Su director general, Orlando Darío Morfi González, explica que su experiencia primera en ese sentido fue con los desechos de vidrio, producto que almacenaba en grandes cantidades y cuyo mercado se había perdido tras el cierre de la fábrica Vidrios Lisa.
“En colaboración con especialistas de nuestra universidad y otros investigadores, llegamos a fabricar un producto único en el mundo: un bloque de construcción compuesto solo por vidrio y cemento. Esto nos estimuló a incorporar nuevos artículos”, recuerda.
Actualmente, en la empresa se elaboran más de 30 productos, donde destacan materiales de la construcción, mangueras y tuberías, artículos plásticos para el hogar, tapas para botellas de ron, sogas, rejas de acero, vasos de vidrio, entre otros.
“Mención aparte debemos hacer de nuestra producción alternativa líder: vigas y tablas de plástico reciclado. Estas se emplean en servicios de diseño y construcción de estructuras para el turismo, como pasarelas, casetas, parques infantiles, bancos, mesas, entre otros. En la propia empresa contamos con una tienda minorista y un parque infantil confeccionados con estos materiales”, dice Morfi González.
Las tablas de plástico reciclado se emplean en servicios de diseño y construcción de estructuras para el turismo. Foto: Cortesía de Orlando Darío Morfi González.
La comercialización incluye también a los productos ociosos y reutilizables. Estos últimos son artículos que se desechan, pero pueden volver a utilizarse tras un proceso sencillo de selección y descontaminación.
Si le preguntan por los próximos implementos que fabricará su empresa, el directivo responde que todo lo posible. “Para ello contamos con una UEB de innovación y desarrollo y realizamos colaboraciones con universidades y centros de investigación. Por el momento, estamos concentrados en briquetas de madera (aserrín), tableros de madera plástica, teja para techos, rejillas para piscinas, postes ranurados para viviendas y losas para pisos y patios”.
Más que alternativas, producciones muy necesarias
Las producciones alternativas son una opción innegable para, con materias primas nacionales, paliar el déficit de ofertas provocado por la crisis económica y la inflación.
Producir, comercializar y aumentar la gama de artículos propios tiene una repercusión directa en la satisfacción de las necesidades de la sociedad y en la mejora de la economía, para lo cual son fundamentales la innovación y proactividad.
Cada empresa, en la medida de sus posibilidades, debe encontrar su propio camino, con la autogestión como bandera principal.
Solo así se sostendrán industrias modernas, resilientes y acordes a las demandas de desarrollo de un país que necesita poner manos a la obra sin dilaciones.