PROTAGONISTAS: Dayana Reyes Fajardo. Ha sido una tarea muy bonita

Manzanillo. Junio 12.- Una veintena de jóvenes del campus Blas Roca de la Universidad de Granma integran el contingente juvenil Victoria de Girón, que por estos realizan importantes acciones en las comunidades para la atención a las personas solas, fundamentalmente a los adultos mayores y a aquella población vulnerable para protegerlos contra la COVID-19.

Una de estas muchachas es Dayana Reyes Fajardo quien estudia el tercer año de la Licenciatura en Lenguas Extranjeras, específicamente el inglés. Para ella, formar parte de este grupo le ha permitido adquirir nuevas experiencias que no olvidará.

«Ha sido una tarea ardua pero muy bonita porque hemos tenido que compartir cara a cara con los vecinos que cumplen con el aislamiento social, especialmente con los ancianos y enfermos a los cuales les realizamos los mandados que necesiten, les buscamos los productos de la canasta básica y los módulos que se han vendido en el municipio. Todos están agradecidos con la atención y la ayuda que les brindamos, porque de esta forma mientras ellos se quedan en las casas, somos los jóvenes, los que tenemos menos vulnerabilidades, los que les brindamos este apoyo, y nos da alegría al verlo contentos».

Muchas son las anécdotas que contar de las vivencias en estas acciones, por lo que Dayana agradece el hecho de que la hayan seleccionado para formar parte de este contingente, porque así le ayuda a vencer sus temores que algún día  deben desaparecer para cuando esté frente  a una aula.

«Sí, porque soy una persona bastante tímida, no me gusta salir mucho de la casa y esta  actividad me ha ayudado a tener  más relaciones con mis vecinos, a acercarme a ellos  a conocer la situación que tiene cada cuál, y poder ayudarnos entre todos porque en estos momentos lo que tenemos que hacer es brindar nuestra solidaridad», manifestó la joven.

De estos días ella guarda en su corazón el vínculo y la familiaridad que  ha logrado con una adulta mayor de su barrio. «Hay una señora que atiendo, que es cristiana y muy cariñosa, me estuvo contando que tiene una vecina de unos 75 años aproximadamente, que está muy agradecida con la atención que le brindamos, que ha tenido todo a su tiempo, no le ha faltado nada y se siente muy complacida con nuestro gesto», agregó.

Para Dayana la participación de los jóvenes en tareas como estas es muy bonita, porque, «de nuestra parte cumplimos con la Revolución, animamos a las demás personas a seguir adelante porque en realidad nuestro país nos necesita».

En el contingente no sólo le han llevado los alimentos a los ancianos y enfermos, también les facilitan la compra de los medicamentos, y hasta realizan acciones de higienización de centros escolares y participan en los trabajos voluntarios en cooperativas agropecuarias y organopónicos del municipio.

-¿Si la Revolución llamara a los jóvenes  a participar en  otras tareas como estas, asumirían igual con esa energía?

-Claro que sí porque siempre estamos dispuestos a cumplir, en todo momento hemos dado el paso al frente y en cada situación lo demostramos.

Mi mensaje para los demás jóvenes es que se unan a nosotros porque la Revolución los necesita.

Me siento satisfecha con este trabajo porque ha sido una experiencia muy buena, estamos ayudando y colaborando con los demás, y mientras las personas estén bien, eso para nosotros es muy gratificante.

 

 

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