La sala pediátrica del Hospital de Rehabilitación Julio Díaz muestra nuevos bríos, gracias a un proyecto con la pyme estatal Tecnoespuma para mejorar los implementos de rehabilitación de los niños en situación de discapacidad.
“La colaboración comenzó de forma espontánea, hace alrededor de ocho meses. En un grupo de WhatsApp de gestores de desarrollo local lancé la propuesta de que los actores económicos visitaran nuestro hospital y coordináramos acciones para mejorar el servicio. Tecnoespuma respondió enseguida. Sus trabajadores se ofrecieron a resolver cualquier problema desde sus capacidades, y así empezó este vínculo, que ya casi es de familia”, recuerda el doctor Eduardo Dunn García, jefe del Servicio de Rehabilitación Pediátrica del hospital.
Contribuir sin fines de lucro a los sectores priorizados es una de las bases de la pyme estatal Tecnoespuma, que se dedica, hace casi dos años, al trabajo con poliestireno expandido (conocido como poliespuma), y a la elaboración de productos para los sectores biotecnológico y constructivo, principalmente.
Gracias al proyecto desarrollado en el Julio Díaz se confeccionan asientos moldeados pélvicos, rodillos, posicionadores, cuñas, flotadores y una escalera -ya casi terminada-, para que los niños puedan subir y bajar por una rampa. Cada artículo es fundamental para la rehabilitación de los menores, y llegan en un momento oportuno, pues los de la institución sanitaria ya estaban en mal estado.
Lázaro Miguel Soto, diseñador gráfico de la pyme, comenta que los artículos se desarrollaron bajo la supervisión del doctor Dunn, y se ha tratado de incluir en la elaboración a otras empresas y actores, en este caso, de la industria deportiva.
“El primer lote que entregamos a la institución, de alrededor de siete juegos de artículos, lo pudimos forrar en una fábrica de implementos deportivos de Artemisa, porque el poliespuma necesita cubrirse, para evitar su deterioro, o que cause quemaduras en los niños”, afirma.
Según el doctor Dunn, se han obtenido implementos de rehabilitación de alta calidad. El producto estrella son los asientos moldeados pélvicos, que ya han beneficiado a cinco niños. Su objetivo es corregir la sedestación, con un molde de yeso personalizado para cada menor, incrustado en una base de poliestireno.
El doctor Dunn comenta que se han obtenido implementos de rehabilitación de alta calidad. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate.
De acuerdo con Lázaro Miguel Soto, su ventaja es que se pueden adaptar a diferentes superficies, como los coches y los autos, son más ligeros y presentan mayor estabilidad que los tradicionales asientos de yeso.
“No existe en el mundo un asiento moldeado pélvico como el que desarrollamos con Tecnoespuma. El original es de yeso completo. Este es más liviano y ofrece otro tipo de confort. También tiene la ventaja de que empleamos menos yeso en su elaboración, gracias al poliespuma”, comenta el doctor Dunn.
Del primer al último asiento elaborado por Tecnoespuma ha existido una mejora apreciable. Inicialmente, los padres de los niños beneficiados debían pintar el artículo para incrementar su durabilidad. Ahora Tecnoespuma entrega los asientos terminados con pintura plastificante, de forma gratuita.
“Esto lo hemos logrado por gestiones propias de la pyme y porque queremos que nuestros productos tengan una calidad óptima. Lo hacemos pensando en un sector priorizado, pues estos niños suelen tener la piel frágil y merecen nuestros mayores esfuerzos”, considera Juan Manuel Guerra, tecnólogo de la pyme.
De acuerdo con el doctor Dunn, los niños que han utilizado estos soportes han mostrado una mejora inmediata. Él tiene la experiencia muy de cerca en su familia, pues un sobrino recibió los beneficios del asiento elaborado por Tecnoespuma.
“Inicialmente, el niño tenía muchas dificultades para sentarse. Se le realizó un tratamiento durante alrededor de tres meses en el hospital, y mejoró, pero no terminaba de consolidar la sedestación ni el buen manejo de los miembros superiores. Tras usar el asiento moldeado pélvico sus habilidades manuales progresaron. Ahora es capaz de sostener los juguetes, pasarlos de una mano a la otra, llevarlos a la boca, inclinarse hacia adelante y volver a incorporarse, algo que no hacía anteriormente”, explica.
Otra beneficiada ha sido la niña avileña Leidy Mariam, de ocho años, quien padece las secuelas de una parálisis cerebral infantil. De acuerdo con su mamá, Ana Cecilia León, la niña comenzó a usar el asiento hace poco más de un mes, porque necesitaba que sus piernas estuvieran abiertas para lograr una mejor sedestación.
“Agradecemos que existan estos proyectos -señala-, porque nuestros niños merecen mejorar su calidad de vida. Antes del asiento, Leidy Mariam usaba una silla correctora, pero corría el riesgo de que su columna se deformara. Este implemento le da más comodidad y mantiene su cadera en postura. Se siente firme y puede girar en su tronco sin miedo a caerse”.
De las mayores satisfacciones del proyecto con la pyme, el doctor Dunn destaca la posibilidad de coincidir con personas dispuestas a servir, que aman a los niños en situación de discapacidad y tienen la habilidad de desarrollar una idea en poco tiempo.
Tecnoespuma también agradece la oportunidad y busca aliados comprometidos con estas obras sociales. “Tenemos que sensibilizar a otros actores que puedan involucrarse en estos proyectos, para entregar productos con la mayor calidad posible. El esfuerzo se recompensa con la alegría de los padres y el bienestar de los niños”, sostiene Lázaro Miguel Soto.
Además de los aportes a la sala de rehabilitación infantil, la pyme donó el falso techo del Laboratorio de Análisis de la Marcha de la institución, y estará a cargo del montaje de la estructura. Este local es clave para realizar el estudio de la marcha y determinar el mejor tratamiento para los pacientes, pero estaba inhabilitado desde enero.
“El falso techo que teníamos era de yeso. Pesaba demasiado, y la estructura cedió. Desde principios de año no podíamos trabajar. Este donativo de Tecnoespuma llega como un aliciente que nos permitirá retomar las actividades en menos de un mes”, comenta Claribel Puentes, especialista principal del área.
La pyme donó el falso techo del Laboratorio de Análisis de la Marcha de la institución y estará a cargo de su montaje. Foto: Abel Padrón Padilla/ Cubadebate.
La pyme tras el proyecto
La pyme estatal Tecnoespuma fue creada hace casi dos años en Boyeros, como parte del proceso de transformación de la OSDE Gelect. Lo que era un taller de la unidad empresarial de base (UEB) Segere, de la Empresa de Refrigeración y Calderas, hoy es una apuesta novedosa, con tecnología capaz de generar mesas, planchas para falso techos, columnas, embalajes de diversos tipos, y muchos otros productos, a partir de poliestireno expandido.
En opinión de Juan Manuel Guerra, la idea de convertir la entidad en pyme estatal fue acertada. Hoy sus 10 trabajadores gestionan los recursos, desarrollan su empresa y cooperan en obras sociales de sectores como la educación, la salud y los hogares de ancianos. “En el trabajo social no hay fecha ni horario, hacemos lo que esté a nuestro alcance cuando haga falta”, señala.
Hace poco Tecnoespuma realizó contribuciones en su circunscripción, con donaciones a madres embarazadas con problemas de cubierta en sus viviendas y la entrega de juguetes a niños de la zona, lo cual ha generado un impacto favorable en la comunidad.
“En el trabajo social no hay fecha ni horario, hacemos lo que esté a nuestro alcance cuando haga falta”, señala Juan Manuel Guerra. Foto: Abel Padrón Padilla/Cubadebate.
Además de las labores con el hospital Julio Díaz, la pyme elaboró carteles y semilleros para el Hospital Dermatológico ubicado en El Rincón; así como carteles y falso techos para escuelas y hogares de ancianos.
En la pasada Feria Internacional de La Habana, la entidad recibió la alegría del Premio a la Calidad, lo cual ha sido un empuje para seguir perfeccionando su labor. Entre los proyectos actuales, busca mejorar las cajas isotérmicas destinadas a la industria biotecnológica.
“Queremos hacer las cajas por moldeo, porque las que estamos fabricando son con cortes y la terminación no es igual. Con las actuales se están exportando las vacunas cubanas al mercado de América, pero el objetivo es llegar también a Europa y otras regiones”, dice Juan Manuel Guerra.
La pyme incursiona también en el sector de la construcción. Recientemente participó en Fecons 2024, donde apostó por el desarrollo de viviendas modulares, la elaboración de cubiertas ligeras y rígidas al mismo tiempo y la potenciación de los falso techos, productos claves en la climatización de los locales.
La premisa es incursionar todo el tiempo en nuevas áreas, como el trabajo en 3D, para el cual pretenden importar equipos que faciliten el diseño de parques temáticos y escenografías.
“Tal vez los clientes no saben que podemos hacer escenografías, y hemos trabajado en esa área, incluso antes de ser pyme”, comenta Lázaro Miguel Soto.
El propósito de Tecnoespuma es renovarse y contribuir al desarrollo social desde la base. Sus trabajadores apuestan por la excelencia y muestran cuánto pueden hacer las nuevas formas de gestión por el crecimiento del país.