Lima, 19 ene (Prensa Latina) La capital peruana tendrá hoy una jornada de protesta con grupos de manifestantes llegados del interior, en un clima de tensión tras dos nuevas muertes en disturbios en la región surandina de Puno.
Una campaña mediática que augura posibles acciones de violencia se acentuó anoche, tras el asedio de manifestantes a la comisaría de la localidad puneña de Macusani por moradores de pueblos cercanos que prendieron fuego al recinto, cuyos agentes fueron evacuados en dos helicópteros.
En el asedio la Policía disparó, según reportes radiales, y las autoridades de salud informaron de la muerte de Sonia Aguilar, de 35 años, y un adulto cuyo cadáver no fue identificado, decesos que se sumaron a 20 registrados en Puno la semana pasada.
La jornada de protesta se propone motivar a la población de Lima, que concentra a un tercio de los 33 millones de habitantes del país, a sumarse a la lucha por la renuncia de la presidenta Dina Boluarte.
Dirigentes de al menos 10 regiones, llegados para la movilización de hoy, denunciaron en conferencia de prensa a los responsables de más de 50 muertes en las últimas dos semanas y en una primera ola de bloqueos de carreteras, huelgas y marchas que incluyeron tomas de aeropuertos y ataques a edificios públicos.
Aseguraron a la prensa internacional y local que las demostraciones de hoy serán pacíficas, aunque congresistas de derecha extrema, como Maricarmen Alva y José Cueto, pidieron al Gobierno que responda con mano dura y más allá del estado de emergencia vigente, declare el estado de sitio.
Denunciaron también la hostilidad de la Policía, a la que advirtieron que no podrán amedrentar porque el movimiento representa el despertar de los pueblos.
Explicaron que es la primera vez que las protestas no exigen reivindicaciones salariales o sociales, sino una plataforma política.
Esa incluye la exigencia de prontas elecciones generales adelantadas y en estas un referendo sobre si el pueblo quiere o no la convocatoria a una Asamblea Constituyente.
De otro lado, en la ciudad centroandina de Huancavelica, en el segundo día de un paro general de 48 horas, manifestantes incendiaron la casa del gobernador de la región del mismo nombre, Leoncio Huayllani, y el juzgado de la ciudad.
En la norteña región de la Libertad una mujer adulta murió por un paro respiratorio y una adolescente sufrió un aborto, ambas cuando se mantenían en autobuses bloqueados por manifestantes.
La presidenta Boluarte, por su parte, se reunió con los ministros de Defensa, Jorge Chávez, y del Interior, Vicente Romero, evidentemente para tratar sobre la llamada toma de Lima y a un reportero de televisión le llamó la atención que recibiera a la embajadora de Estados Unidos, Lisa Kenna.