Una alerta desde el occidente

Yoelkis Céspedes ha elevado su rendimiento en la segunda etapa, en la que exhibe average de 359 (39-14), el más alto de los granmenses, con un jonrón, par de tubeyes y ocho carreras impulsadas / FOTO Rafael Martínez Arias
Yoelkis Céspedes ha elevado su rendimiento en la segunda etapa, en la que exhibe average de 359 (39-14), el más alto de los granmenses, con un jonrón, par de tubeyes y ocho carreras impulsadas / FOTO Rafael Martínez Arias

El saldo de cuatro derrotas en las últimas seis presentaciones podría ser una alerta para los Alazanes de Granma, que desde hoy rivalizan con Las Tunas, líder de la presente campaña beisbolera.

A pesar de ese resultado adverso, los monarcas exponentes muestran balance positivo en el torneo élite (8-4), en gran medida, por las barridas que propinaron a Artemisa e Industriales, en Bayamo.

Sin embargo, con el periplo de tres compromisos que iniciaron por el Victoria de Girón, de Matanzas, afloraron algunas deficiencias, que les pasaron factura en las subseries contra Cocodrilos y Vegueros.

De tal forma, las lesiones de algunos atletas obligaron al mentor Carlos Martí Santos a realizar cambios en el line up regular, de hecho una desventaja, más evidente ahora cuando se miden con equipos más completos.

Por supuesto, en esas circunstancias el nivel tiende a bajar, máxime cuando algunos suplentes, con poco recorrido, asumen la titularidad.

Una muestra fehaciente en la merma del rendimiento colectivo lo ofrece la defensa, con 10 errores en los seis encuentros más recientes, que unido a la discreta ofensiva, hacen más vulnerable a la selección.

Durante la visita a predios pinareños y matanceros, los bateadores granmenses exhibieron un anémico 224 de average (210-47), con solo 21 carreras anotadas y promedio de 3.5 por partido, muy inferior al 6.5 de la primera fase, aunque la calidad de los serpentineros que enfrentan es superior.

De ahí, el protagonismo que no debe perder el cuerpo de lanzadores, lo más notable hasta el momento, independientemente de las malas salidas de Leandro Martínez, uno de los artífices en la clasificación.

A pesar del traspié por el occidente del país, se vio a un equipo combativo y que apuesta siempre por el triunfo, mientras sigue vivo en la defensa de la corona que consiguió en la edición anterior.

Por el momento, los Alazanes aparecen en el cuarto puesto de la tabla, con 34 victorias y 23 reveses, a cinco rayas completas de los Leñadores (38-17), quienes no renuncian al propósito de superar la mejor actuación histórica, dos sextos lugares, y de incluirse por primera vez entre los cuatro grandes.

Además, Leones y Cocodrilos (35-20) definían ayer el choque aplazado del jueves y cuál de los dos elencos asumía los quintos cotejos de este segmento encaramado en la segunda posición. Entretanto, Vegueros (31-26) y Cazadores (30-27) cierran el ordenamiento.

Por Leonardo Leyva Paneque