La Central Termoeléctrica Lidio Ramón Pérez de Felton, un poblado costero en la bahía de Nipe, correspondiente al municipio holguinero de Mayarí, es, actualmente, la mayor generadora de electricidad en Cuba.
Allí casi amanecimos este jueves, y no fue casual.
Aunque se percibía una especie de lógica tensión, ya al filo del mediodía allí también sobresalía la seguridad de lo que se hace bien.
Luego de varias jornadas, de 24 horas de trabajo ininterrumpidas cada una, y cuatro “picos” por medio, o sea esos momentos, principalmente en las noches, cuando de verdad hace falta generación, se lograba arrancar nuevamente la unidad generadora número dos.
El Ingeniero Mecánico Euclides Rodríguez Mejías, director técnico de la legendaria planta mayaricera, resumía así el momento.
“La unidad numero dos la sacamos de servicio con un pronóstico de cinco días, por varios problemas de funcionamiento. Hoy se cumple el quinto día, y por lo tanto estamos listos para su arrancada, con una generación inicial de más de 160 megawatts, y la seguridad de llegar, en breve, a unos 220 megawatts”.
Apenas un rato después, a las 4 y 16 minutos de la tarde, de este primer día de julio, esos seguros megawatts de la unidad número dos, se sincronizaban exitosamente al sistema nacional de distribución, y como acababa de ratificar el director técnico:
“Irán subiendo rápido hasta unos 220 megawatts, sin duda alguna un buen empujón desde una central termoeléctrica, que, como complemento positivo, utiliza petróleo crudo cubano”.
Esas buenas noticias, llegaron acompañadas de otras mayores.
La unidad número uno, detenida hace cerca de cuatro años, cuando dio paso a una impostergable gran inversión, también está a punto de arranque, al entrar en sus ajustes finales y puesta en marcha, tal como aseguraba a Radio Rebelde, el Ingeniero Eric Milanés, experimentado especialista a cargo de dirigir la inversión.
Foto: Germán Veloz Placencia
“La rehabilitación ha sido un trabajo muy profundo y amplio. Es una planta prácticamente nueva, con un costo de 186 millones de pesos y cuenta con medios y equipos de punta, modernos y altamente confiables”.
Colosal esfuerzo del estado cubano, en medio de la difícil situación económica, en medio del ataque de la pandemia, ahora recrudecido, en medio del criminal bloqueo norteamericano, que sigue con la pretensión de aplastarnos.
Respuesta de un colectivo de trabajadores que sabe muy bien de la responsabilidad que impone asumir la misión a ellos asignada, como así resume el Ingeniero Osmel Maturell, director general de la Central Termoeléctrica Lidio Ramón Pérez, de Felton.
“Es una lucha sin cuartel en un momento bien difícil, y la idea precisamente es aliviar la situación, a través de una generación estable, y combustible cubano.”
Recorrimos mucho más de 200 kilómetros, desde Holguín a Felton, regreso, transitamos de madrugada, y también bajo un solo agobiante, pasamos por sitios donde ahora mismo la pandemia ataca, y fuerte.
Pero tanto como los trabajadores de la central termoeléctrica Lidio Ramón Pérez, nosotros también nos sentimos felices.