Los datos obtenidos por el Ejército de Rusia acerca de la incursión de las tropas de Kiev en el territorio ruso revelan que el líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, tenía planeado que sus soldados tomaran «el control total» de la ciudad de Kurchátov hasta el día 11 de agosto con el fin de apoderarse de la central nuclear de Kursk —ubicada a unos 40 kilómetros al oeste del centro de la provincia rusa homónima— y utilizarlo como ultimátum en posibles negociaciones con Moscú.
Así lo declaró este miércoles el comandante de las fuerzas especiales rusas Ajmat y jefe adjunto de la Dirección Principal de Trabajo Militar y Político del Ministerio de Defensa, Aptí Alaudínov, en una entrevista concedida a Pervy Kanal, destacando que se trata de «información confirmada».
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El comandante explicó que Zelenski decidió dar ese paso para «apoderarse de la mayor cantidad de territorio posible, para poder negociar» luego las condiciones de paz con Rusia, «porque entiende que el apoyo» por parte de Occidente «ya está cerca de llegar a su fin».
«Como pueden ver, hoy es 14 de agosto y [los militares ucranianos] están muy lejos de Kurchátov. Su avance activo ya fue detenido«, afirmó el militar, agregando que en los bosques aún «hay algunas fuerzas aisladas [ucranianas] que se infiltraron antes». «Lo estamos monitoreando; pero las fuerzas principales del enemigo ya han sido detenidas y bloqueadas. La mayor parte del equipo que entró en nuestro territorio fue destruido y una gran cantidad de personal fue eliminado», aseveró.
Control de la ciudad de Sudzha
Alaudínov también declaró que la ciudad de Sudzha, en la provincia de Kursk, a pesar de algunos reportes no confirmados en las redes, no está tomada por las FF.AA. de Ucrania. «En la ciudad de Sudzha actualmente se encuentran las unidades del Ministerio de Defensa ruso, mientras que las tropas enemigas se ubican alrededor de la urbe y en algunas de sus partes. Allí diariamente se llevan a cabo combates activos. El enemigo no puede decir que controla completamente a Sudzha, porque en realidad no la controla», subrayó.
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«Pérdidas irremediables» de las FF.AA. de Ucrania
Durante la entrevista, el comandante manifestó que las tropas rusas causaron «daños muy graves» a las tropas de Kiev en el pueblo de Martýnovka, que era uno de los principales puntos de logística para los planes de avance de sus fuerzas. «A día de hoy, han sido detenidos por completo y una gran cantidad de equipo y personal han sido destruidos y se está destruyendo», sostuvo.
Entre otras cosas, explicó que las FF.AA. de Ucrania «sacaron sus recursos de todas las direcciones, de toda la línea de contacto de combate, aproximadamente de 1.000 kilómetros» con fin de «arrojarlo todo» a la zona donde efectuaron su intento de incursión a la provincia de Kursk. «Bueno, como pueden ver, todo esto metódicamente ya se está destruyendo, la mayor parte ya fue destruida», reiteró.
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Asimismo, el jefe del batallón explicó que el Ejército de Ucrania, «luchando de esta manera» en territorio ruso «y tratando de establecer las rutas logísticas, sufrirán el tipo de pérdidas que serán irremediables para ellos», asegurando que «es exactamente lo que está sucediendo ahora». «Así que no habrá ningunas negociaciones en las que Zelya [Zelenski] pueda darnos algún tipo de ultimátum, tratando de humillar a nuestro país, como planearon hacerlo junto con los estadounidenses y todo el bloque de la OTAN, calcularon mal«, concluyó.