Por la salud de todos

Foto: Policlínico Francisca Rivero
Foto: Policlínico Francisca Rivero

Manzanillo. Diciembre 12.- La salud en nuestra Cuba es un derecho más que conquistado. Uno de esos imprescindibles que revelan la esencia de la obra social revolucionaria, por encima de las circunstancias por las que hoy atraviesa la Mayor de las Antillas.

Cada 12 de diciembre se celebra en el orbe el Día de la Cobertura Universal de Salud, y en ello los cubanos tenemos el mérito, en la medida que se garantiza el acceso equitativo a servicios integrales en salud con una amplia red de instituciones que abarcan las atenciones primaria, secundaria y terciaria, y que no hace distinciones ni diferencias ante los pacientes.

La consagración de hombres y mujeres que sienten suya la vida ajena habita en esta isla, contrapuesta al abismo que genera en la actualidad la carencia de recursos materiales, como insumos médicos y medicamentos básicos e imprescindibles para contrarrestar las enfermedades.

El esfuerzo y esmero de ese capital humano es sustento de esa cobertura, porque permanece en los consultorios del médico y la enfermera de la familia propiciando los cuidados básicos y en la gestión de la prevención de factores de riesgo y la promoción de estilos de vida saludables.

Acciones de promoción, prevención, diagnóstico y tratamiento en los barrios y comunidades, hacen posible que en las familias haya dominio de los manejos y conductas a seguir en virtud de su estado de bienestar físico.

Desde su compromiso la ciencia se pone al servicio del bien común, de logros que fortalecen el Sistema Nacional de Salud y se extienden a otras partes del mundo como muestra de solidaridad, otro de los cimientos de la cobertura universal en salud.

En medio de un proceso de debates y enriquecimiento del proyecto de Ley de Salud Pública, hacer por este como un derecho esencial de todo ciudadano, es una máxima para Cuba y sus profesionales.