Plaza Celia Sánchez Manduley, monumento de la historia en Revolución

Manzanillo. Enero 26.- Imponente por su elegancia y sencillez, como la heroína a quien honra, la Plaza de la Revolución de la ciudad del Golfo de Guacanayabo cumple este martes 24 años de su inauguración, cual símbolo de la historia que atesora en su conjunto monumental.

«[…] Si esa mujer es como tu dices, donde mejor está es en Manzanillo, porque allí va a ser más útil […]», dijo el Comandante invicto de Celia Sánchez Manduley, y justo es ella quien nombra a la explanada donde se da cita el pueblo en momentos trascendentales para consagrar su carácter y decisión irrevocable de defender la obra patria, que tiene la esencia humanista por excelencia de la combatiente revolucionaria.

En sus 64 mil 800 metros cuadrados, Manzanillo, Granma, en representación de Cuba toda, ha pactado con la independencia y soberanía de la nación, en multitudinarias concentraciones que enaltecen los principios de una raíz libertaria que comenzó a crecer por estas tierras y llega a lo profundo, asciende y se adhiere a la piel de sus mujeres y hombres.

Es su tribuna, estructurada por plataformas a desniveles, testigo del verbo encendido de oradores con la pasión cubanísima en la garganta y el alma, aunque ninguno como Fidel Castro Ruz, en citas como la del 28 de marzo de 2002 cuando inauguró el Curso de Superación Integral para Jóvenes.

Concurrencias enardecidas, como la del cinco de diciembre de 1999 cuando aconteció la primera Tribuna Abierta de la Revolución por el regreso del niño Elián, marcan su huella en la historia de la nación, que en igual fecha cimentó la Batalla de las Ideas, bajo el precepto martiano de que «trincheras de ideas valen más que trincheras de piedras».

Hoy, tras un amplio proceso de mantenimiento constructivo, destacan mejor los paneles de respaldo que perpetúan sucesos y héroes de trascendencia en las etapas de la guerra independentista desde 1868 hasta 1959, en representación igualmente de las franjas de la bandera.

Resplandece la estrella central, solitaria, que estos forman con sus puntos más altos, complementada con 19 elementos verticales en honor al Apóstol de la independencia, paradigma de la obra revolucionaria y su autor intelectual.

Allí, próxima a las aguas del Guacanayabo, aledaña a la circunvalante Camilo Cienfuegos, con acceso desde diferentes puntos de la urbe, sigue siendo partícipe, protagonista, compañera de su pueblo en cada fiesta del proletariado manzanillero, en actos de reafirmación de principios, en convocatorias a continuar fortaleciendo el quehacer de la Cuba indoblegable.

Con firmeza natural se baña de luna y sol, se viste de heroína, y preserva la prominencia que tiene esta, su ciudad, en el devenir de la nación cual espacio surtidor del grito libertario, contrafuerte de la Sierra Maestra, y cuna de cubanos comprometidos con la continuidad de la Revolución.