Susy, una artista en el mundo de las uñas (+Fotos)

Susy, una manicura que disfruta lo que hace // Foto: Marlene Herrera
Susy, una manicura que disfruta lo que hace // Foto: Marlene Herrera

“A veces me acuesto y cierro los ojos y empiezo a ver un diseño y vengo rápido y lo hago en una uña. He estado acostada, imagino un diseño, me levanto y Yasel (esposo) me dice ¿y tú qué estás haciendo? y le digo espérate un momento que estoy haciendo un diseño para mis clientas”. Esa es la pasión propia de una mujer emprendedora que demuestra la joven Susana Bárzaga Guisado, si de hacer su trabajo se trata.

Ella es manicura autodidacta. Desde que tenía unos 12 años y cursaba la secundaria básica empezó a “arreglar uñas naturales, como era antes, sin poner acrílico, ni gel. Ya después cuando empezaron a  ponerse estas uñas, compré algunos productos, y empecé por mi mamá. Te imaginas  que el primer día acabé con las manos de ella. (RISAS) Compré todo y empecé a practicar en la casa con mi familia, hasta que tuve mi primera clienta que fue una amistad, y me quedaron bastante bien”.

Atiende dos o tres clientas diariamente, según la complejidad del trabajo // Foto: Marlene Herrera

Y cuando dice la familia, no escapa ni el esposo. Todos apoyaron el inicio de esta nueva etapa en el arte de las uñas, que puso a prueba a quienes se dedican a este hermoso oficio, y Susy, como la conocen todos, dio muestras de la resiliencia necesaria para emprender, desde la falta de recursos y los precios altos de los productos mayormente importados. Aprendió del complejo mundo del arreglo de uñas, que va más allá de un color mate o perlado, para hablar de relieves, decoraciones, pedrería, swirl nails, uñas de mármol, glaseadas, y un sinnúmero de variantes que requieren habilidades artísticas que ella domina con buen gusto y excelencia.

 “Ella es una buena manicura, trata de hacerlo todo al 100, si no está en sus planes hacerlo, y tú se lo pides, ella busca la manera de complacerte. Aunque no tiene todos los recursos, como otras manicuras que tienen más facilidades para trabajar, ella lo hace mejor que muchas, siempre tiene complacida a todas las clientas”, comenta Sandra, una clienta habitual que espera su turno para ser atendida.

Sandra es una de sus clientas más exigente, y «siempre salgo complacida«// Foto: Marlene Herrera

“La escogí porque me gusta su trabajo, me complace en todo lo que le pido. Soy exigente y ella trata de complacerme en todo y lo hace lo mejor que puede. Yo traigo lo que quiero que me haga y ella trata de hacerlo al 100 por ciento igual al diseño que traje. Casi siempre lo hace perfecto”, señala.

Susana es una de las más de mil mujeres trabajadoras por cuenta propia en el municipio de Manzanillo, poseedora de un espíritu emprendedor que vio una oportunidad de negocio, e inició un proyecto, que ha perdurado en el tiempo por la calidad de sus resultados y sobre todo porque lo disfruta. “Yo lo hago porque me gusta, porque esto es lo que me gusta a mí hacer, en parte también por la economía. Yo estudie para profesora y pudiera trabajar en eso, pero esto es lo que me gusta hacer”.

Quizás esa formación didáctica, y la nobleza que la caracteriza sea lo que la  lleve a compartir sus conocimientos con otras muchachas que como ella, desean empezar su propio negocio como manicuras.

Enseñando a una futura emprendedora, cómo hacer las uñas acrílicas // Foto: Marlene Herrera

“Como dicen, el sol sale para todos, y cada quien tiene sus clientas y ellas tienen sus preferencias, aquí mismo en el barrio hay otra que arregla y yo le digo a ella, cada quien tiene sus clientes, y la clienta va porque le gusta tu trabajo, pero también por como tú las tratas”, nos dice ante la pregunta provocadora de si no le teme a la competencia, pues desde que llegamos a su casa no es precisamente una clienta, sino una futura manicura quien recibe sus atenciones al darle una clase, de cómo se ponen las acrílicas.

“Lo que más me gusta es hacer los dibujos, y aunque creo que también hay que un poco nacer con esa facilidad, si practican, lo logran.  Cuando no sé hacer algo lo busco en Google, veo videos, y practico en la casa”.

La pequeña Anyi será sin dudas, otra mujer emprendedora // Foto: Marlene Herrera

Madre de una pequeña que, quizás en juego, quizás como anticipo al futuro, ya practica con quienes se lo permiten, tiene una familia creada junto a su esposo, y juntos trabajan por el bienestar del hogar, en estos tiempos en que las mujeres con esfuerzos, sacrificios, creatividad y empuje, constituyen una valiosa fuerza para salir adelante en la construcción de la sociedad.

Con conocimientos de lo que hace, muy agradable en su trato, y sobre todo una verdadera artista en el diseño de uñas con los gustos más exigentes, Susy,  se levanta cada mañana con ilusión por trabajar en aquello que realmente le gusta, y que la hace sentirse feliz junto a su Anyi, y su esposo Yasel.

Una muestra de los diseños de Susy (cortesía de la entrevistada)