SNB 59: Cocodrilos pasan escoba, Leñadores se acercan a la cima

El matancero Eduardo Blanco llegó a eslabonar una cadena de 8 hits consecutivos contra el picheo de Santiago de Cuba. Foto: Boris Luis Cabrera / Cubadebate

De sorpresa se puede catalogar la barrida que completaron este martes los Cocodrilos a costa de las Avispas de Santiago de Cuba, líderes de la primera fase del campeonato, y por demás el equipo menos afectado con respecto a la ausencia de sus principales hombres. Pero lo cierto es que en apenas tres días, los yumurinos les han dado alcance en la tabla de posiciones y ya han vuelto a preocupar a sus contrarios.

Un despiadado y devastador ataque desataron en esta jornada para sacar fuera de combate a los indómitos 18-3 en los predios del Victoria de Girón.
Diecinueve imparables salieron de las muñecas yumurinas, entre ellos tres dobles e igual cantidad de cuadrangulares, frente a los envíos de los cuatro lanzadores rivales que desfilaron por el angustioso montículo.

Dainier Gálvez se fue de 3-3, sacó la pelota del parque con las bases repletas y remolcó seis carreras para el plato, para liderar el bombardeo de los anfitriones. Dismani Ortiz pegó también tres incogibles pero en cinco oportunidades con un bambinazo incluido y William Luis Campillo conectó un vuelacercas solitario en el único turno oficial que consumió en la caja de bateo.

Otro que tuvo una jornada productiva fue Juan Miguel Vázquez, quien trajo a tres compañeros a casa con un doble en tres turnos al bate, mientras Eduardo Blanco se fue de 3-2 y vio rota su cadena de ocho incogibles de forma consecutiva.

Noelvis Enteza (5-3) se tambaleó varias veces en el box, pero se llevó el triunfo después de completar cinco episodios tras permitir nueve hits, regalar cuatro bases por bolas y tolerar tres carreras limpias.

El relevista zurdo Osmedi Garcia soportó nueve anotaciones en 2.1 entradas, pero el derrotado fue el abridor Ulfrido Garcia (5-4), maltratado con seis carreras limpias en apenas una entrada y un tercio de labor.

En el Latino, los Leñadores tuneros impusieron su rango de campeones nacionales y aplastaron con categoría a los Industriales de la capital 7-0, en un choque donde se colgaron del brazo de Yander Guevara para alcanzar la victoria.

El refuerzo avileño le volvió a hacer la gracia a los capitalinos y se reafirmó como uno de sus más letales verdugos históricos, convertido en el lanzador que más derrotas les ha infringido en los últimos tiempos, trabajando seis entradas inmaculadas mientras le pegaban apenas cinco indiscutibles en todo el trayecto.

El máscara Rafael Viñales conectó tres cohetes, entre ellos un jonronazo de dos carreras frente a los envíos del refuerzo espirituano Pedro Álvarez, quien apenas pudo mantenerse en el box cuatro episodios en su debut con la camiseta azul y cargó con el revés.

Yordanis Alarcón, Yordan Manduley y Héctor Castillo, ligaron un par de hits cada uno.

Rafael Viñales conectó tres jits contra Industriales en el juego, jonrón incluído. Foto: Boris Luis Cabrera / Cubadebate

Por último, en el choque más emotivo de la jornada, los Elefantes de Cienfuegos vinieron de abajo en el marcador y lograron su primera victoria de esta segunda fase a costa de los punteros Toros camagüeyanos (9-4), para sorpresa de todos los presentes en el Cándido González.

Un cuadrangular con la casa llena del emergente Edwin Vassel para que su tropa tomara una ventaja definitiva en el octavo capítulo, fue un cubo de agua fría para los parciales de casa, que vieron como los Toros en pocos minutos cayeron a tierra y no se levantaron más hasta el out 27.

Un triple del receptor Richel López comenzando la entrada, se combinó con un sencillo impulsador de Yusniel Ibáñez (líder en ese departamento con 53) y una base por bolas, para expulsar del montículo al relevista Carlos Espinosa, a la postre perdedor del desafío.

Su sustituto Yoandy Cruz no pudo apagar el fuego al aceptar cañonazo de Juan Miguel Soriano, bolear intencionalmente a Rubén Valdés y soportar el estacazo demoledor que limpió las almohadillas.

Miguel Lahera lanzó 3.1 entradas sin permitir libertades y logró su primera victoria con la nueva camiseta.