«El sistema bancario ha sido uno de los principales blancos de las medidas impuestas durante la administración del expresidente Donald Trump y que no tienen otro objetivo que el de reforzar los efectos del bloqueo al pueblo de Cuba; afectaciones monetario-financieras que, en el último periodo, superan los 284 millones de dólares».
Así afirmó Oscar Luis Hung Pentón, presidente de la Asociación Nacional de Economistas y Contadores de Cuba, durante su intervención en el foro online «Verdades Del Bloqueo» que se desarrolló este martes.
Más allá de las cifras, dijo, los daños se constatan en la creciente persecución financiera, provocando el rechazo o negativa de bancos e instituciones internacionales a realizar operaciones con nuestro país.
Todo ello, agregó, se ha evidenciado en el cierre de cuentas y contratos que con anterioridad ya habíamos establecido, en la constante devolución de transferencias bancarias y cancelación de claves para el intercambio de información financiera.
Por ejemplo, en los últimos meses más de 130 bancos extranjeros han rescindido transacciones con Cuba y se han obstaculizado 315 operaciones, apuntó.
En el encuentro virtual, que tuvo como objetivo exponer cómo esta vil política del gobierno de Estados Unidos hacia Cuba es el principal obstáculo para el desarrollo económico y social de nuestro país, también participaron como panelistas representantes de diferentes actividades económicas y productivas, del sector estatal y de formas de gestión no estatal.
Uno de ellos fue el trabajador por cuenta propia Carlos Miguel Pérez, especializado en el desarrollo de software y consultoría informática, quien afirmó que el sector cuentapropista, al igual que el resto de la economía cubana, se ve afectado para exportar sus servicios, como consecuencia del bloqueo.
Nuestro mercado más natural, por una cuestión de cercanía, debería ser América Latina y Estados Unidos, sin embargo, la relación exportadora con la región es mínima, pues los bancos y las sucursales de esa área geográfica no pueden establecer relaciones financieras con Cuba, recordó.
Por otra parte, indicó, las principales plataformas de comunicación que existen en el mundo, como Zoom o Skype, hoy están bloqueados para la Isla, lo mismo sucede con muchas de las tecnologías que se ofrecen como ecosistemas para el desarrollo de software.
El bloqueo es horizontal y afecta a cada sector de la sociedad y ello, a su vez, repercute en la calidad de vida de los cubanos, consideró.
Criterio que comparte Norailys González Enriquez, directora adjunta de la empresa estatal Quimimport, quien destacó que el comercio exterior es una de los sectores más afectado por esta política, especialmente, ante la imposibilidad de realizar contrataciones en el propio territorio estadounidense.
Cuba -señaló- no puede acceder a ese mercado, lo que nos obliga a trabajar mediante intermediarios y ello encarece las operaciones. Además, no tenemos la posibilidad de pagar los servicios o insumos contratos en dólar americano, y al hacerlo en otras divisas diferentes a esa moneda, aumentan los costos de negociación y compra.