Manzanillo. Enero 23.- Con la notificación de tres nuevos casos positivos a la COVID-19, según el parte nacional del Ministerio de Salud Pública emitido en esta mañana de sábado, el territorio manzanillero confirma un brote de la enfermedad a punto de partida de la irresponsabilidad y negligencia de la población.
En la jornada, de los cinco pacientes que reportó la provincia de Granma, tres son residentes de esta localidad costera, de ellos dos autóctonos y un caso importado que se corresponde con viajera de 67 años de edad procedente de Haití, con llegada el día 20 de este mes, quien tiene ocho contactos, según informó a la televisión local la doctora Sulay Rodríguez Domínguez, jefa del puesto de mando de la enfermedad en la dirección municipal de Salud.
Los dos pacientes contagiados con el SarS-Covs-2 como parte de la transmisión autóctona dentro de la localidad son un matrimonio, paciente femenina de 41 años de edad y masculino de 44 años, con residencia en El Uvero y reporte de 41 contactos.
Estos habitantes del consejo popular nueve, adscritos al área de salud cuatro del policlínico Luis Enrique de la Paz permanecían en cuarentena, al igual que la paciente de 24 años de edad que se incluyó en las estadísticas del parte de cierre del 21 de enero a las 12 de la noche, por ser contactos directos del caso índice de El Remate, viajera confirmada el pasado 14 de enero.
Este incremento de los contagios vuelve a demostrar las consecuencias negativas de las indisciplinas, tanto al llegar de otras naciones y violar los tiempos de cuarentena pautados hasta la llegada de los resultados de sus PCR, como en relación al incumplimiento de las medidas de bioseguridad, en particular el distanciamiento y el uso del nasobuco.
De ello resulta que Manzanillo tenga hasta este momento 11 casos activos con el nuevo coronavirus, ocho autóctonos y tres importados; además, un caso sospechoso.
En esta urbe, aunque no se reportan incidencias de síndromes respiratorios en los hospitales y centros de atención a personas vulnerables, se produce un incremento de los casos atendidos con infecciones respiratorias agudas y la mayor incidencia se localiza en el policlínico Luis Enrique de La Paz.
Tales circunstancias epidemiológicas aclaman de elevar la percepción del riesgo entre la población manzanillera, y del cumplimiento estricto de las medidas pautadas por las autoridades sanitarias y gubernamentales en esta etapa de Nueva Normalidad, para evitar un retroceso y salvaguardar la salud de todos, en particular de los más vulnerables.