Manzanillo. Enero 16.- Una de las muestras de que en Cuba no queda nadie desamparado es el de la manzanillera Josefa Profet González, una anciana de 84 años que ha sido beneficiada con la ayuda social aprobada por el gobierno local.
Josefa no tiene familiares obligados que le puedan asistir de sus necesidades, por eso ella siente todo el agradecimiento por la protección que el estado cubano le ha dado en este tiempo de la tarea ordenamiento, que llegó en la actual etapa de la nueva normalidad de enfrentamiento a la COVID-19.
Visiblemente emocionada esta sencilla y humilde mujer comparte su testimonio sobre lo que significa ser atendida y valorada como ser humano, una oportunidad que le dió el destino al vivir en un país donde lo principal es la atención a las personas y no los bienes materiales.
Con los cambios ocurridos en nuestro país Profet de pronto se sintió triste al no saber que iba ser de su destino sin hijos, sin familiares cercanos, sólo el modesto apoyo de una prima, pero ahora está tranquila y puede contar lo que significa recibir una ayuda económica para tener una vida digna.
«Esta ayuda la recibo con un amor divino porque mi prima me estuvo ayudando dentro de sus posibilidades, pero ya no puede, ambas tenemos problemas de salud y el sueldo de ella no podía favorecernos, por lo tanto este apoyo que me dió el estado cubano es glorioso.
Este beneficio me ha favorecido para mis gastos en el hogar, y es una muestra de lo que ha dicho este gobierno que aquí no quedará nadie desprotegido, por lo que estoy muy conforme con lo recibido.
En realidad si no hubiera recibido esta ayuda no sé que hubiera sido de mí, porque con todas estas transformaciones no sabría como podía comprar mis medicamentos, mis alimentos y cualquier otra cosa necesaria o me guste.
Este tipo de protección es muy vital y excelente para que si otra persona la requiera la reciba, y repito estoy muy agradecida de este gobierno. Doy todas las gracias también al grupo de trabajo comunitario, al delegado de mi circunscripción a la asamblea municipal del Poder Popular, la presidenta del consejo popular por todo el acompañamiento que me han dado y la colaboración que la valoro de lo mejor.
Finalmente quiero transmitir como mensaje las gracias a esta Revolución, a nuestro presidente y a todo el Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) por atender y asistir a lo más necesitados. En los momentos que cualquier cubano requiera de sus prestaciones ellos siempre están ahí, nos escuchan, nos valoran y nos brindan el apoyo que se merecen los ciudadanos de nuestro país».