Manzanillo. Enero 28.- Al José Martí «íntegro, de inteligencia desbordada, con un amor tenaz por la causa de los necesitados», la ciudad del Golfo de Guacanayabo dedicó su tradicional Vigilia Martiana en el 171 aniversario de su natalicio.
El festejo nacido de la intelectualidad manzanillera cumplió en la noche sus 30 años de ser rescatado por el Centro de promoción de la cultura literaria Manuel Navarro Luna, como heredero del homenaje al Maestro, instituido en 1926 por Juan Francisco Sariol, y que “ha crecido en participación y perspectiva, con actos de la mayor sencillez y elocuencia ciudadana», a decir del escritor Ángel Larramendi Mecía, director de la citada institución.
Desde la canción, el verso, la urbe honró al Apóstol de la independencia con la certeza de que Cuba va: por sus logros, aspiraciones, metas y futuro mejor, en gala con guión de Esperanza Martínez Llópiz y dirección de Noelia Yaque.
Los honores al Héroe Nacional llegaron a través de un performance del proyecto Corales del Golfo, que abrió la velada; de las notas musicales de la Orquesta de guitarra de la Escuela Elemental de Música local con las interpretaciones de Guajira para tres versos y Un pueblo sincero, con arreglos de Ramiro Zayas; y la entonación por el Coro de la academia artística de la Canción de La Muñeca negra, con letra y música de Gisela Hernández.
Los Versos Sencillos de Martí vibraron en las voces de actores del grupo de teatro Ategua; mientras que el sentir de cuerdas y corazones, en abrazo al legado del más universal de los cubanos, eferveció con los trovadores José Alberto Suárez y Reynier Arrow, y las cantantes Yudit Álvarez y Rosi.
Una vez más la Vigilia Martiana concluyó con el tradicional recorrido desde la calle Pedro Figueredo hasta el busto de José Martí, ubicado en el parque central de la ciudad, con la Banda municipal de concierto al frente.
Reynier Beltrán Sánchez y Rossío Naranjo Figueredo, máximas autoridades política y gubernamental de Manzanillo, depositaron en el mármol una ofrenda floral como tributo del pueblo manzanillero al Apóstol.
“La celebración del natalicio de Martí nos obliga a pensar en los desafíos del siglo XXI a partir de la cosmovisión martiana, en la cual encontramos un gigantesco caudal de ideas para contemplar mejor el mundo actual y trabajar para transformarlo en función de los intereses supremos para la humanidad”, y deviene en deber y entrega, como lo fue la Patria para Martí, sentenció Javier Daniel Ortiz Leyva, director municipal de Cultura y arte, ante la mirada del inmortal pensador.
La representación del pueblo manzanillero, sus máximos dirigentes y artistas participantes en la Vigilia Martiana, la confirma como tradición patriótico-cultural más antigua de la ciudad, y evidencia el compromiso de esta porción oriental con el pensamiento y legado histórico del Héroe Nacional de Cuba.